El profesor Yamamura distribuye toallas sanitarias a las niñas cada semana, lo que provoca acaloradas discusiones. ¿Cuáles son las excelentes cualidades de este maestro?
Primero, el profesor puede pensar en tal cosa, lo que demuestra que es una persona muy cuidadosa.
Desde el concepto antiguo, la menstruación parece ser algo de lo que la gente habla en público, por lo que los niños de esas zonas montañosas no sabrán este tipo de cosas y se asustarán mucho cuando tengan su primera vez. período. El profesor de apoyo puede tener esto en cuenta y decirles a las niñas que no sean tímidas. Este es un fenómeno fisiológico normal y no es difícil saberlo. Educar a los niños de esta manera puede hacerles saber a las niñas que saben lo suficiente como para no entrar en pánico. Los profesores pueden pensar en esas cosas, lo que demuestra que son muy cuidadosos.
En segundo lugar, los profesores enseñan en los pueblos de montaña, no temen las dificultades, están dedicados a su trabajo y hacen todo por los niños.
En los pueblos pobres de montaña, los niños saben muy poco. Si no hay buenas condiciones para que adquieran conocimientos, habrá maestros en la ciudad para enseñar, pero pocos maestros pueden soportar las dificultades y no quejarse, y mucho menos considerar todos los aspectos de la vida de los niños. Esta maestra voluntaria no solo es diligente y dedicada en la enseñanza, sino que también cuida sus vidas, populariza conocimientos fisiológicos y entrega toallas sanitarias a las niñas cada semana, para que estén en buen estado. Un maestro tan atento, diligente y dedicado merece nuestro respeto.
En tercer lugar, este maestro tiene una visión de descubrimiento, un corazón bondadoso y está dispuesto a contribuir.
El profesor sabe que los niños de aquí no conocen este conocimiento, por eso lo populariza y les dice que no sean tímidos. Son cosas muy normales, que no sólo destacan en la enseñanza, sino que también se pueden encontrar en otros aspectos. Estos niños provienen de familias pobres, por lo que sus maestros pagan por ellos y les dan toallas sanitarias todas las semanas, sólo por su salud y seguridad, no por su propio beneficio.
Un maestro tan desinteresado, diligente y muy cuidadoso merece nuestros elogios, y un maestro así merece nuestro respeto.