Requisitos de la Oficina de Salud para la decoración de cocinas de catering
Requisitos de salud ambiental
El Negociado de Salud exige que el ambiente de la cocina del catering esté limpio y ordenado, libre de acumulación de escombros y suciedad, y que los pisos, paredes y techos estén mantenerse limpio y libre de moho y desprendimiento. La cocina debe contar con buenas instalaciones de ventilación para asegurar la circulación del aire y evitar la acumulación de humo y olor a aceite.
Requisitos de equipos e instalaciones
La Oficina de Salud exige que los equipos e instalaciones en las cocinas de catering cumplan con los estándares sanitarios y se les dé mantenimiento con regularidad. Los equipos de gas y eléctricos en la cocina deben utilizar productos calificados y se deben instalar medidas de seguridad como prevención de incendios y explosiones. Depósitos de agua, tuberías de drenaje, instalaciones de iluminación, etc. También debe instalarse en un lugar adecuado para facilitar la limpieza y el funcionamiento.
Requisitos de almacenamiento de alimentos
La Oficina de Salud exige que las áreas de almacenamiento de alimentos en las cocinas de catering estén secas, ventiladas y fáciles de limpiar. Los alimentos almacenados deben mantenerse a temperaturas y humedad específicas para evitar su deterioro y contaminación. Al mismo tiempo, el área de almacenamiento debe estar separada del área de procesamiento de alimentos cocinados para evitar contaminación cruzada.
Requisitos de esterilización
La Oficina de Salud exige que las cocinas de catering se desinfecten periódicamente. Vajilla, utensilios, herramientas, etc. La cocina debe desinfectarse a alta temperatura o con desinfectantes que cumplan estándares higiénicos para garantizar la seguridad e higiene de los alimentos.
Requisitos de eliminación de residuos
La Oficina de Salud exige que las cocinas de catering cuenten con instalaciones y métodos adecuados para la eliminación de basura. Los residuos deben almacenarse en categorías. Los botes de basura de la cocina deben vaciarse, limpiarse y sellarse periódicamente para evitar la propagación de olores y gérmenes.