Efecto teatral y dilema del prisionero
El significado económico es que si el teatro se vuelve popular, en términos de maximizar los intereses personales, se agotará primero. Si todos quieren hacer esto, el resultado será que todos bloquearán la puerta y nadie podrá escapar. La búsqueda individual de maximizar los intereses sin considerar los intereses de los demás ha llevado a tragedias grupales periódicas.
La historia de "El dilema del prisionero" cuenta la historia de dos sospechosos de delincuentes que fueron capturados por la policía después de cometer un delito y retenidos en diferentes salas para ser interrogados. La policía sabía que los dos hombres eran culpables, pero carecían de pruebas suficientes. La policía les dijo a todos: si ambos niegan, cada uno será sentenciado a un año; si ambos confiesan, cada uno será sentenciado a ocho años si uno confiesa y el otro niega, será puesto en libertad si confiesa, y será sentenciado; a diez años si lo niega. Por lo tanto, todo prisionero enfrenta dos opciones: declararse culpable o negarlo. Pero no importa lo que elija la pareja, la mejor opción para cada preso es confesar: si la pareja lo niega, será puesto en libertad si confiesa, si niega, será condenado a diez años, y confesar es mejor que no confesar. ; si su compañero confiesa, si confiesa, será condenado a ocho años, es mejor confesar que negar. Como resultado, ambos sospechosos optaron por confesar y fueron condenados a ocho años de prisión. Si ambos lo niegan, cada uno recibirá un año de prisión, lo que obviamente es un buen resultado. El profundo problema que refleja el dilema del prisionero es que la racionalidad individual humana a veces conduce a la irracionalidad colectiva: los humanos inteligentes quedarán atrapados por su propia inteligencia o dañarán los intereses colectivos.