Experiencia de aprendizaje de métodos de respuesta a emergencias para funcionarios públicos
Según esta connotación, las emergencias son particularmente importantes para nuestros cuadros y trabajadores de asuntos civiles, que es lo mismo que nuestra función de ayuda en casos de desastre en asuntos civiles. En segundo lugar, responder activamente a las emergencias. Al afrontar emergencias, debemos centrarnos en la prevención, estar preparados para las emergencias y realmente cortarlas de raíz. Sólo estableciendo firmemente la conciencia de "estar preparados para el peligro en tiempos de paz", dominando gradualmente las reglas y tomando de manera proactiva medidas preventivas y de preparación podremos reducir fundamentalmente la aparición de emergencias. Al mismo tiempo, es necesario resumir y explorar cómo responder a diversas emergencias de manera institucional, científica y profesional cuando las emergencias no se pueden evitar por completo. El primero es establecer y mejorar el sistema de gestión de emergencias. Los departamentos gubernamentales deben establecer y mejorar un sistema de gestión de emergencias con gestión clasificada, responsabilidades jerárquicas, combinación de departamentos y gestión territorial, y formar un mecanismo de emergencia con mando unificado, funciones completas, capacidad de respuesta y operación eficiente. Acelerar la construcción del sistema legal de gestión de emergencias, formar un sistema legal de gestión de emergencias eficaz y llevar la gestión de emergencias a una vía estandarizada, institucionalizada y legalizada. En segundo lugar, formular y mejorar los mecanismos del plan de respuesta a emergencias. Formule cuidadosamente planes de emergencia para emergencias públicas, mejore los sistemas de monitoreo, pronóstico, pronóstico, alerta temprana y respuesta rápida, fortalezca la construcción de equipos profesionales de socorro en casos de desastre, mejore el sistema de reserva de material de socorro en casos de desastre, realice simulacros de capacitación y planificación y mejore integralmente el gobierno. y la capacidad de toda la sociedad para resistir los riesgos. En tercer lugar, acelerar la construcción de un sistema de respuesta a emergencias científicas y tecnológicas. Otorgar gran importancia al uso de la ciencia y la tecnología para mejorar la capacidad de respuesta a emergencias públicas, fortalecer la investigación científica sobre la gestión de emergencias, mejorar los equipos y niveles técnicos de emergencia, acelerar la construcción de plataformas de información para la gestión de emergencias y formar un soporte científico y tecnológico. sistema de seguridad pública y gestión de emergencias. Cuarto, fortalecer la organización y coordinación de la gestión de emergencias. Fortalecer la gestión colaborativa de emergencias de los departamentos gubernamentales pertinentes, implementar sus respectivos planes especiales y coordinar vertical y horizontalmente de acuerdo con los requisitos del plan de emergencia general. Mejorar el sistema organizacional para responder a emergencias públicas, aclarar las responsabilidades de todas las partes y garantizar que, si algo sucede, se pueda organizar de manera efectiva, responder rápidamente, operar de manera eficiente y responder sin caos. Quinto, llevar a cabo activamente publicidad y capacitación de emergencia. Dar amplia publicidad a las leyes, reglamentos y planes de emergencia pertinentes a través de diversos medios, especialmente conocimientos sobre prevención, evitación de riesgos, autorrescate, rescate mutuo y reducción de desastres, mejorar la conciencia pública sobre las crisis y el sentido de responsabilidad social, y mejorar el autorrescate y el rescate mutuo. las capacidades especiales de emergencia deben llevarse a cabo en profundidad. En particular, se fortalecerá la educación especial sobre gestión de crisis para los funcionarios públicos y las prácticas de capacitación para responder a crisis importantes para mejorar integralmente los niveles de gestión.
En tercer lugar, mejorar la capacidad de respuesta a emergencias. Responder a las emergencias es un trabajo completamente nuevo, y tanto el gobierno como el público deben estudiar mucho, explorar mucho y mejorar sus capacidades de respuesta. Primero, cultive una sensación de crisis. La conciencia de crisis es el punto de partida de la alerta de crisis. En tiempos de desarrollo pacífico, la gente suele carecer de una sensación de crisis. Al simular situaciones de crisis y mejorar continuamente el sistema de alerta temprana y monitoreo de crisis, el gobierno y el público pueden cultivar la conciencia sobre la crisis.
Por ejemplo, los simulacros de desastres cultivan la conciencia sobre la reducción de desastres y el socorro entre los cuadros de asuntos civiles mediante la práctica de problemas que pueden surgir en el combate real, de modo que tengan la preparación psicológica y material para la prevención de desastres.
En segundo lugar, establecer un sistema descentralizado de gestión de crisis. En la actualidad, las crisis repentinas tienen una fuerte movilidad entre regiones e incluso transfronterizas, pero en la gestión de crisis por parte del gobierno, deberíamos desempeñar un papel más local o sublocal. Esto se debe a que el gobierno descentralizado no sólo puede promover la transformación de la gestión gubernamental de la jerarquía a la participación y la cooperación, sino también hacerla más flexible e innovadora, lo que resulta en un mayor sentido de responsabilidad y, además, una mayor eficiencia, a medida que los ciudadanos responden a las políticas públicas; La mejora de las capacidades y la necesidad de una gobernanza social diversificada han hecho posible que el gobierno establezca un sistema descentralizado de gestión de crisis. Por ejemplo, responder a los desastres de los tifones no es sólo una cuestión de nuestros asuntos civiles, sino que también involucra a los departamentos de finanzas, meteorología, conservación del agua, transporte, seguridad pública, alimentación y otros. Deberíamos cooperar unos con otros y hacer nuestra parte.
En tercer lugar, estabilizar la sociedad y movilizarla para participar en la gestión de crisis. Para la sociedad, el mayor daño causado por las crisis públicas es la destrucción del orden social normal y la consiguiente vulnerabilidad social y psicológica. Por lo tanto, mantener un orden social estable y mantener la trayectoria social original es la primera opción. En este proceso, las relaciones públicas del gobierno y la divulgación de información son muy importantes. Al mismo tiempo, necesitamos movilizar fuerzas sociales para que participen. Por un lado, la participación de las fuerzas sociales puede reducir los efectos secundarios de la crisis en el público, permitirle comprender la verdad, eliminar el miedo, eliminar los rumores, el pánico y otros subproductos que los creadores de la crisis esperan que acompañen a la crisis. , y desempeñar un papel en la estabilización de la sociedad y restablecer el orden, por otro lado, puede reducir los costos de procesamiento del gobierno;
Responder a las emergencias está íntimamente relacionado con cada uno de nosotros, involucra los intereses vitales de cada uno de nosotros y es lo mismo para todos. En este proceso, sólo el gobierno y el público cumplen con sus responsabilidades, hacen suficientes preparativos ideológicos, organizativos, materiales y técnicos para prevenir y hacer frente a diversas emergencias públicas, establecen y mejoran los sistemas sociales de alerta temprana y los mecanismos de respuesta a emergencias, y mejoran la prevención y el control. Con la capacidad de manejar emergencias públicas, nuestras vidas serán más pacíficas y felices, y nuestra sociedad será más armoniosa y hermosa.