La Red de Conocimientos Pedagógicos - Conocimientos históricos - Hoy el médico forense de la escuela me estranguló y dijo que tenía bocio. Estaba confundido. Sólo tengo dieciséis años y no quiero morir todavía. ¡Qué hacer! ...

Hoy el médico forense de la escuela me estranguló y dijo que tenía bocio. Estaba confundido. Sólo tengo dieciséis años y no quiero morir todavía. ¡Qué hacer! ...

1. Si comes grandes cantidades de repollo, repollo, colza, mandioca, nueces, soja o rábanos durante mucho tiempo, debes cambiar tus hábitos alimenticios y evitar o comer menos de estos alimentos;

2. Si la glándula tiroides se vuelve más pequeña o el bocio desaparece, indica que el bocio está relacionado con esta dieta;

3. Consuma más alimentos ricos en yodo y observe durante un período de tiempo. Si el bocio disminuye posteriormente, esta medida es eficaz. Si el bocio no disminuye se deben considerar otros métodos, y lo mejor es acudir al hospital para escuchar los consejos del médico;

Además, preste la debida atención a los siguientes alimentos:

1. Coma más verduras y los siguientes alimentos: brócoli, brotes de col rizada, repollo, coco blanco, hojas de mostaza, melocotones, peras, nabos, frijoles, espinacas, nabos. Estos alimentos ayudan a suprimir las hormonas tiroideas.

2. Evite los irritantes. No consuma lácteos durante al menos tres meses y evite estimulantes, café, té, nicotina, refrescos, etc. Las sustancias contenidas en el apestoso tofu pueden agravar la afección, por lo que los pacientes con hipertiroidismo deben consumirlo con precaución.

3. Consuma más maní y alimentos fríos. Los maní son beneficiosos para los pacientes con hipertiroidismo y se pueden consumir con regularidad. Aquellos que son prósperos pueden comer más alimentos fríos como sandía, frijoles, apio y azucenas. Las personas con deficiencia de yin y calor interno pueden comer moras, tortugas de caparazón blando, hongos, azucenas, bayas de goji, patos y otros alimentos.

4. Coma más frutas frescas. A menudo se pueden comer frutas frescas ricas en vitaminas, como manzanas, melocotones, dátiles, limones, cocos, mangos, higos, plátanos, caquis, etc. También se pueden consumir con regularidad maní, nueces, semillas de loto, castañas de agua, arroz con cabezas de pollo y otras frutas secas.