¿Cómo impartir clases particulares de matemáticas de primer grado de forma más eficaz?
Buscando elementos matemáticos en la vida
Los niños de primer grado todavía se centran en el aprendizaje intuitivo.
Por ejemplo, antes de comer, los niños deben contar el número de personas de su familia y no extrañarse a sí mismos. Puede pedirle a su bebé que le extienda los palillos. ¿Cuántos palillos hay en un par? ¿Cuántos palillos se le darán a cuántas personas? Un par por persona, ¿cuántos pares se deben regalar?
Por ejemplo, para los cumpleaños, ate los globos en una cuerda y guíe a los niños ¿qué es una cuerda de globos y cuántos globos hay en cada cuerda? Guíe a los niños para que comprendan los cuantificadores de la vida.
Muchos niños tienen un pobre sentido de orientación. Los padres pueden guiarlos. ¿Qué puedes hacer con tu mano izquierda? ¿Qué puedes hacer con tu mano derecha? Gira a la izquierda, gira a la derecha. Gire a la izquierda en la intersección y a la derecha en la intersección. Al principio, los niños pueden cometer errores. No importa. Si lo haces demasiadas veces, naturalmente cometerás errores.
"¿Cuántos pisos caminaste desde el primer piso hasta el sexto? ¿Cuántos cuchillos se necesitaron para cortar 6 trozos de cuerda? ¿Cuántos clips necesitas para cinco pañuelos?"
"El minutero pasa de ¿Cuántos minutos se tarda en pasar del 1 al 5? ¿Cuántos minutos se tarda en serrar un trozo de madera cuatro veces a la misma velocidad? ”
Estas preguntas son preguntas simples de la Olimpíada de Matemáticas que son comunes en la vida. Hay prototipos. Los padres pueden brindar orientación en cualquier momento sin decir: Bebé, ven, estudiemos juntos. Al escuchar esta frase, los bebés suelen sentirse cansados de aprender. Integre el aprendizaje en la vida, la vida es un aula y puedes aprender en cualquier lugar.
2. Pequeños ejercicios apropiados
Como recién ingresan al primer grado, el número de preguntas es pequeño. Los padres pueden encontrar conscientemente algunas preguntas en el examen para que sus bebés practiquen. .
Los profesores jóvenes generalmente no asignan tareas escritas. Los padres deben guiar a sus hijos para que realicen algunos ejercicios y brindarles comentarios sobre el aprendizaje de sus hijos en la escuela.