Boceto de alumnos de tercer grado de primaria
Papá: Esta vez no me fue bien en el examen. Llegué último.
Hijo: Papá (golpeando la mesa), ¿no soy siempre el último lugar en el examen?
Papá: Siempre he sido penúltimo y mis notas son muy estables. Sin embargo, el tonto que quedó último en el examen tuvo diarrea. Él no vino y mis notas cayeron al penúltimo lugar.
Hijo: (señalando a papá) ¿Cómo fue tu hijo a la escuela? Esos dos agujeros debajo de las cejas están ventilando el aire.
Papá: En la parte inferior de mis cejas… tengo dos agujeros.
Profesor: Sea cortés al hablar.
Hijo: Esto es lo que suele decir de mí.
Papá: Estás diciendo tonterías. ¿Soy igual que tú? Ah
Hijo: Normalmente eres como yo. Te hice un descuento. ¿Sabías? ¿Sabías? Mamá y yo no te hemos visto sonreír en años.
Papá: ¿Cómo es posible, maestro? ¿Te vi sonriendo? Jajaja, vi a todos reír.
Maestro: Creo que deberías pasar más tiempo con tus hijos y tu esposa.
Papá: Pasar más tiempo con tus hijos y tu esposa es más fácil de decir que de hacer para ti. Soy un hombre. Tengo una carrera. Hay más de 300 personas en la fábrica. ¿Por qué quieres prestarme atención? :¿Quién no quiere pasar más tiempo con su esposa e hijos? Pero el director de la fábrica lo acompañará, pero ¿quién no? ¿A quién se le pagará? ¿Cómo debo alimentar a este niño, dejarlo ir a la escuela, comprarle libros, mochilas y devolvérselo?
Hijo: Dámelo,
Papá: Levántate.
Papá: (leyendo) Querido, querido? Mi corazón está vacío. He estado lejos de ti durante cuatro minutos. Cuatro minutos después estás vacío.
Maestra: Ven, déjame ver, déjame ver.
Papá: ¿Qué pasa?
Maestro: Sólo cuando tú sonríes puedo respirar, y sólo cuando yo respiro puedes jadear.
Papá: (a su hijo) Estás aquí para respiración artificial.
Profe: No te preocupes, no te preocupes, no creo que esto lo haya escrito un niño.
Papá: Él no lo escribió. ¿Quién lo escribió? Escribo.
Oye: Tú lo escribiste.
Papá: Estás diciendo tonterías.
Oye: Se lo escribiste a mi madre.
Profe: ¿Cómo puede ser?
Hijo: (señalando a papá) Tú no siempre vienes a casa, entonces le pregunté a mamá, mamá, papá siempre no viene a casa, ¿no nos quiere? Mamá dijo que no, papá nos ama a nosotros y a esta familia. Verás, mi padre le escribió esta carta a su madre. Siempre he llevado esta carta conmigo y me resistía a devolvérsela a mi madre.
Papá abrazó a su hijo y lloró: niño
Maestra: Lo siento mucho. Es mi culpa.
Papá: Lo siento, maestro, por hacerte reír.
La maestra estaba llorando~ ~Woo~ ~ ~ ~
El padre y el hijo miraron a su alrededor y encontraron a la maestra llorando, y se asustaron: ¡Ah!
Profesor: Hijo, si escribes este ensayo, definitivamente obtendrás el primer lugar en la clase. No olvides dárselo al profesor mañana.
La maestra lloró~~woo~~~abrió la puerta y se fue.
Papá: Dije, ¿todos tus profesores lloran así?
El hijo respondió: Papá, no me atrevo, no me atrevo a volver a traer a la maestra a casa.
Papá: Vamos, hijo.
Hijo: Papá.
Papá: Hijo, deberías haber traído a la maestra a casa hace mucho tiempo. Es culpa de papá. Papá, lo siento por ti (lágrimas).
El hijo corrió, abrazó a su padre y lloraron juntos.
Papá: Hijo, papá siempre está muy ocupado y casi se olvida de ti y de mamá. Lo siento papá, de ahora en adelante pasaré más tiempo contigo y haré más tareas para que puedas convertirte en el verdadero número uno de la clase. ¿Qué tal?
Mi dedo meñique: gancho.
Papá estiró el dedo meñique: gancho.
Papá: El gancho no será reemplazado aunque lo cuelgues durante cien años.
Papá: Aún te ríes, mocoso. ¿Por qué no empacas tus cosas y te vas?
Papá: Papá, jaja, te fue muy bien.
Papá, mi hijo sonrió. ...