Los profesores de primaria invitan a los padres.
Los estudiantes de primer grado son jóvenes y ahora carecen de capacidad de autocuidado y de ejercicio en casa, por lo que es posible que no puedan completar la tarea. Pero la higiene es imprescindible. Desde la perspectiva de la escuela, sólo podemos pedirles a los padres que la limpien. Pero los padres están muy ocupados ahora, especialmente porque la mayoría de las escuelas primarias funcionan en días laborables y muchos padres no pueden salir.
Se puede decir que el conflicto entre hogar y escuela se ha vuelto cada vez más tenso en los últimos años. Una gran parte del problema es que los padres se involucran demasiado en los asuntos escolares. Ahora, además de dar clases particulares con las tareas, los padres también deben participar en las tareas fuera de la escuela y en los periódicos en la pizarra.
De hecho, las escuelas pueden resolver este problema por sí mismas. En los grados inferiores de las escuelas primarias, los profesores pueden encargarse de cierta higiene y los limpiadores pueden realizar trabajos peligrosos como limpiar ventanas.