Retrato de una hermosa niña de escuela primaria
Mientras estamos conmovidos, mantenemos la verdad, la bondad y la belleza en nuestros corazones; mantener En el movimiento, cambiamos el viejo yo y ganamos el nuevo yo.
Cuando observamos y apreciamos cuidadosamente las personas y las cosas que nos rodean, la cuerda más profunda de nuestro corazón se siente tocada y el sonido natural en nuestro corazón se despierta.
Esos ligeros toques son como los tentáculos de la hiedra acercándose al sol. Cada temblor es la transmisión de información de vida. Aprende a conmoverse, no seas tacaño con tu felicidad, compártela con tus amigos y déjalos aprender a conmoverse, no reprimas tu tristeza, déjala volar hacia el vasto cielo. Mírate al espejo y date un toque, de búsqueda, de bondad, de sinceridad... ¡Descubrirás que el mundo entero se volverá más brillante y hermoso bajo tu toque!