La Red de Conocimientos Pedagógicos - Aprendizaje de inglés - Una niña de escuela primaria, mi compañero de escritorio es un niño. Siempre me acosaba y se enojaba conmigo. ¿Puedo golpearlo?

Una niña de escuela primaria, mi compañero de escritorio es un niño. Siempre me acosaba y se enojaba conmigo. ¿Puedo golpearlo?

Vaya, no sólo puedes golpearlo, sino que también puedes golpearlo fuerte. Pero no puedes afrontarlo solo. Eres demasiado joven para pegarle a un niño. En esta etapa, es el momento en que los niños pequeños son traviesos y traviesos, incluso en la escuela media y secundaria, y no puedes afrontar esto solo. Recuerde:

1. Dígales a los padres y maestros que no se sientan amenazados por él. Una vez que te comprometas una vez, él asumirá que eres fácil de intimidar y te tratará de manera aún más irrazonable. Cuando vuelva a ser irrazonable, debe gritarlo fuerte para que todos los que lo rodean puedan oírlo, para que pueda exponerse al público y no volverse tan irracional.

2. No le pasa nada a tu ropa. No busques razones en ti mismo. Porque en el futuro, en la sociedad, habrá personas más irracionales que pelearán con el pretexto de que la ropa de las niñas no es buena. Este tipo de personas llamarán a la policía directamente cuando se vean. Esto es intolerable.

3. Las niñas son derrotadas físicamente por los niños, por eso hablan en voz alta cuando se encuentran con ellos, o gritan fuerte cuando se los encuentran en la calle. No te reprimas ni dejes que la otra persona piense que eres un matón. Cuanto más muestres miedo y temor, más te acosarán.

Así que para resumir la explicación anterior, recuerda: no tienes ningún problema. Cuando tengas problemas o te sientas débil, pide ayuda a un adulto. Si no hay adultos cerca, habla en voz alta para que todos los que te rodean puedan escuchar lo que la persona grosera te está haciendo. Si no ocurre en el campus sino fuera, por favor llama directamente al 110.

Por último, dile al profesor que ajuste tu asiento. Si continúa acosándote, recuerda no tener miedo, díselo a tus padres y hazle saber que no eres alguien con quien jugar. Puede que ahora tengas miedo, pero debes hablar claro o la próxima amenaza estará dirigida a ti.

Protégete.