¿Son seguras las toallitas húmedas para bebés que se encuentran en el mercado? ¿Puedo dárselo a mi hijo de forma segura?
La respuesta es por supuesto que sí, pero a la hora de elegir toallitas para manos y boca, debemos seguir los siguientes principios. La primera es elegir una marca habitual. Debe saber que algunas marcas habituales, ya sea que utilicen agua pura o materias primas, todas cumplen con los estándares y, por supuesto, los niños pueden usarlas con confianza. El segundo es prestar atención a la débil acidez y la textura de las toallitas húmedas. La llamada acidez débil en realidad se refiere al valor de pH. La textura de las toallitas húmedas debe ser suave, lo que puede reducir la fricción entre las toallitas húmedas y la piel del bebé.
No elijas toallitas perfumadas ni alcohol, porque a las toallitas perfumadas se les deben añadir otras sustancias que tus hijos no necesitarán. En cuanto al alcohol, no hay forma de dárselo directamente a los niños. Aunque el alcohol puede esterilizar y desinfectar, también puede dañar la piel de su hijo. Además, los niños pueden ingerir alcohol en el estómago, lo que no favorece su desarrollo neurológico y también puede provocar irritación gastrointestinal.
El sellado de las toallitas húmedas también es clave, porque un paquete grande de toallitas húmedas puede durar mucho tiempo. Si el efecto de sellado no es bueno, las cosas se secarán rápidamente, lo que no solo genera desperdicio, sino que también permite que entren bacterias en las toallitas. La humedad y la temperatura son dos factores importantes para el crecimiento bacteriano. No permita que las toallitas húmedas se conviertan en un caldo de cultivo para las bacterias.