¿Qué debe hacer un estudiante de primaria si se le derrama la comida sin terminar en el restaurante?
El efecto de comer restos del cubo de basura en público no es tan significativo como se imagina. Prácticas similares han existido durante mucho tiempo, pero la mayoría han desaparecido y nunca fueron prácticas empíricas válidas. Los padres adoptan este método para educar a sus hijos. Aunque puede conmocionar los corazones de los niños hasta cierto punto y hacerlos sentir culpables por el desperdicio de comida, también tiene algunos elementos de espectacularidad y exageración. Después de todo, los niños de hoy en día son relativamente sensatos en la mayoría de los casos. Los padres pueden explicarles a sus hijos la importancia de valorar la comida y señalarles sus errores al desperdiciarla, lo que también puede servir para educar a sus hijos. Además, si quieres educar bien a tus hijos y no desperdiciar alimentos, no sólo a través de esto podrás satisfacer las expectativas de los padres. El propósito debe ser que a medida que los niños crecen, los padres siempre supervisen el comportamiento diario de sus hijos, y cuando los niños desperdicien comida, los padres deben corregirlos de inmediato. Con el tiempo, ayudarán a sus hijos a desarrollar el buen hábito de valorar la comida y dejar de desperdiciarla. Personalmente creo que este efecto educativo es evidentemente más efectivo y más duradero que el anterior. Para los niños, aprender a valorar los alimentos y no desperdiciarlos requiere un proceso de formación de hábitos, y los padres deben ser pacientes. A medida que la vida mejora cada vez más, los niños de hoy rara vez soportan dificultades y no conocen la sensación de que "cada grano es duro". Entonces, ¿cómo educar a los niños para que ahorren alimentos? Aquí te enseñamos tres métodos, uno es cultivar conceptos correctos, el otro es establecer principios y el tercero es dar un buen ejemplo. En el vídeo, el enfoque del padre es extremo, pero es digno de elogio que haya inculcado el concepto de conservación de alimentos a sus hijos. Desde un punto de vista conceptual, hágales saber a los niños que la comida se consigue con esfuerzo y hágales saber cómo valorarla. Con el tiempo, los niños podrán recordar los conceptos correctos.
Cuando los niños son pequeños, los padres pueden poner reglas a sus hijos, como cuánto pueden comer, no tirar las sobras, comer las sobras ellos solos, etc. Los padres ni siquiera deberían desperdiciar comida y mucho menos ayudar a sus hijos a comer las sobras. Los padres pueden instar a sus hijos a comer tanto como sea posible según la situación. Ya sea que coman fuera o en casa, los padres deben dar un buen ejemplo a sus hijos. Generalmente cuando la familia sale a comer, piden una pequeña cantidad y empacan las sobras. A la hora de comer en buffet, enseña a tus hijos a comer todo lo que quieran y a no desperdiciar comida si no tienen suficiente.