Prosa nocturna y poesía en prosa
las estrellas no duermen,
la luna no duerme,
Quiero saber quién es tu madre.
El viento es pretencioso y borracho.
Los sueños están plantados en nubes misteriosas,
Mil años de sueño, unos pocos polvos,
no pueden controlar el mundo como el agua,
Sigo volando en los vastos campos.
Bien y mal, bien y mal,
Lavado por el dolor,
Una copa de vino sucio hiere profundamente el cuerpo,
Deja ir tu humildad,
¿Qué no puedes dar?
Feliz, vacilante,
El ayer se ha ido silenciosamente.
Es tarde en la noche,
las estrellas no duermen,
la luna no duerme,
no preguntaré tienes más preguntas. ¿Quién es la madre?
El cielo sonrió tolerante.
Las flores con sueños no se marchitarán,
La vida es como un electrocardiograma,
Bebe profundamente del corazón azul y de la sabiduría,
El sol es cálido,
Rosas fragantes.
Baile intermitente,
Colorido y cómodo.
Mirando el fuego desde el otro lado, solo en los ríos y lagos,
Me puse mi propia tristeza,
Miré hacia arriba ebrio, y la flauta sonó varias veces,
Además de viejas lágrimas,
Un pez alegre en el mar,
El viento sopla, el viento sopla, p>
¡Estoy felizmente volando en la vasta pradera!