Para cultivar niños sensatos, se deben revisar los métodos educativos de los padres.
Dé un buen ejemplo
Como primer maestro de un niño, cada palabra y acción de los padres es un modelo que sus hijos deben imitar. Muestra un lado maduro y firme y deja que tus hijos aprendan poco a poco en su vida diaria.
Comunicación efectiva
Mantener comunicación espiritual con los niños, escuchar su mundo interior y responder a sus confusiones. Esto hará que los niños estén más dispuestos a compartir con sus padres.
Participación familiar
Involucrar a los niños en las tareas del hogar y cultivar su sentido de responsabilidad e independencia desde una edad temprana. Así sabrán cómo retribuir mejor a sus familias.
Educación para la gratitud
Enseñe a los niños a apreciar a las personas que los rodean y a valorar lo que tienen. Hágales saber que es una virtud agradecer a los demás por su ayuda.
Autodisciplina y autogestión
Guiar a los niños para que establezcan buenos hábitos de vida y planes de estudio, y cultivar la capacidad de autocontrol de los niños.
Tolera el ruido
Cuando los niños cometen errores, enséñales a asumir responsabilidades y a comprender el impacto de sus acciones.
Motivación positiva
Cuando los niños muestran un comportamiento sensato, bríndeles estímulo y afirmación oportunos para que tengan más confianza.
Ambiente familiar armonioso
Crear un ambiente familiar lleno de amor, comprensión y tolerancia hacia los niños, para que los niños estén más dispuestos a abrirse.
Trabajar juntos
Anima a los niños a participar en actividades grupales y cultivar su espíritu de equipo.
Cultivo de la empatía
Enseñe a los niños a pensar en los problemas desde la perspectiva de los demás y a cultivar su compasión y sus cualidades afectuosas.