¿Hay algún daño en que los adultos eduquen a los niños jalándoles siempre las orejas?
Todos sabemos que el oído es uno de los cinco órganos sensoriales del cuerpo humano y que también juega un papel muy importante a la hora de ayudarnos a percibir algo a través del oído. Y, de hecho, hay muchos nervios humanos y puntos de acupuntura en el oído humano.
Por lo que también es un lugar extremadamente frágil que no se puede tocar a voluntad. Y si a una madre le gusta utilizar este método de tirar de las orejas cuando enseña a sus hijos, puede perjudicarles.
Especialmente si a veces estás demasiado enojado o quieres que el niño sienta el dolor con demasiada fuerza, a veces el niño se desmayará por el dolor o afectará los nervios de esta área, afectando los órganos circundantes y Funciones del sistema, como el cerebro humano.
Arrancarse las orejas es un castigo que los padres dan a sus hijos, pero puede causar potenciales daños a la salud. Lo mejor es que los padres no castiguen a sus hijos de esta manera.
Tirar de la oreja puede dañar el nervio del oído, provocar congestión y edema del conducto auditivo externo y provocar que se deforme la forma del oído externo. Por lo tanto, es mejor evitar tirarle de las orejas a su hijo con frecuencia.
Datos ampliados:
Daños en el oído:
1. Dañará el nervio del oído. Hay abundantes nervios en los oídos y la fricción frecuente en los oídos estimula los nervios. A veces, los oídos de los padres son demasiado potentes, lo que puede provocar que el niño sienta dolor en la base de los oídos e incluso provocar un breve desmayo que puede dañar fácilmente los nervios del oído.
2. Provoca congestión y edema del conducto auditivo externo. La tensión en la oreja es muy alta. Frotarse los oídos con frecuencia y fuerza puede provocar tracción, lo que provoca congestión y edema del conducto auditivo externo.
En la vida diaria, los padres no deben utilizar golpes y regaños para educar a sus hijos, especialmente tirándoles de las orejas. Una vez que se comete un error, tendrá un impacto irreversible en la vida del niño. Deben cuidar a sus hijos con cuidado y no dejar que tengan accidentes.
3. Deformación del oído externo. Los oídos de los niños son relativamente frágiles y todavía se encuentran en un estado de crecimiento y desarrollo. Los oídos de los niños a menudo se ven afectados y pueden provocar deformidades del oído externo en los niños.