Una autobiografía de 800 palabras para un estudiante de primer año
El tiempo vuela. Ayer todavía pensaba en la riqueza y variedad de la vida en la escuela secundaria, pero hoy ya estoy inmerso en ella. En esta dorada temporada de otoño de 1996, entré por la puerta de la escuela secundaria Huaizhen. Allí he estado trabajando duro por la frase "Tu camino es ingresar a la Escuela Secundaria No. 1 y luego ir a una universidad prestigiosa", porque tampoco quiero estar a la altura de las ardientes expectativas del profesor de matemáticas que ama. Yo como su propio hijo.
En el primer y segundo año de la escuela secundaria, me desempeñé como representante de la clase de chino y de matemáticas; en el tercer año de la escuela secundaria, me desempeñé como representante de la clase de química y de matemáticas; representante de clase. Durante mi mandato como representante de estas clases, trabajé con diligencia y prontitud para reflejar los deseos de los compañeros a los maestros e informarles sobre los requisitos de los maestros de manera oportuna. En el transcurso de estos tres años, conseguí mi propio prestigio en la clase porque mi desempeño me ganó la confianza de mis compañeros.
Tres años después, cumplí mi deseo y fui admitido en la escuela secundaria número 3, la escuela más famosa de nuestra pequeña área. Las escuelas famosas pueden tener realmente el encanto de las escuelas famosas. Las escuelas espaciosas y la fuerte atmósfera de aprendizaje en el aire siempre me recuerdan que debo tener en cuenta mis objetivos. La vida sencilla y real me hizo entenderme poco a poco a mí mismo.
En la escuela secundaria, cuando me enfrentaba a tareas de aprendizaje pesadas, movilicé plenamente mi entusiasmo y formulé un plan de estudio para no olvidar mi libro más querido. Leo clásicos, leo historia y leo la realidad. He leído "El sueño de las mansiones rojas", "El margen del agua", "Romance de los tres reinos", "Viaje al Oeste", "Lo que el viento se llevó", "La infancia", "Mi universidad", "Madre". y otras obras famosas. A partir de estos libros me he vuelto más sabio y he dejado que mis pensamientos se asienten. Ya no floto porque tengo un punto de partida y un punto de apoyo.