Después de comer uvas, los bebés nacerán con ojos más grandes y hermosos. ¿Existe alguna base científica para esto?
No sé desde cuándo, la gente empezó a creer que comer uvas durante el embarazo haría que los ojos del bebé se agrandaran después del nacimiento. Tal vez sea porque las uvas siempre son muy redondas, o tal vez en comparación con las uvas, el longan tiene un sabor casi caro. Pero pase lo que pase, si un niño nace con ojos pequeños y una sonrisa "agradable", la gente está dispuesta a reírse de sí misma y decir "es toda su culpa por comer demasiadas pasas". Hoy tenemos una buena charla sobre las uvas y el desarrollo de los ojos: ¿Comer uvas hará que tus ojos se agranden?
La respuesta es obvia. Si lo crees, entonces enhorabuena, al menos aún conservas una inocencia infantil, que mucha gente no puede envidiar. Pero, ¿qué determina el tamaño de los ojos de un niño? Dos palabras: ¡genes! Porque los ojos grandes se heredan predominantemente en comparación con los ojos pequeños. En otras palabras, si uno de los padres tiene ojos grandes y párpados dobles, lo más probable es que el bebé que nazca en el futuro también tenga ojos grandes y párpados dobles. Pero si ambas partes tienen ojos pequeños, entonces es realmente difícil dar a luz a un bebé con ojos grandes. Comer uvas durante el embarazo, el resultado: ¡la madre quedó confundida después del nacimiento del bebé!
La Sra. Zhang se encontró con tal problema porque ella y su esposo tienen ojos pequeños. Debido a que se decía en Internet que comer uvas durante el embarazo puede agrandar los ojos del bebé, ella lo creyó. Durante todo el embarazo, las uvas están constantemente disponibles y, por supuesto, hay otras frutas. Con el tiempo, el peso de la Sra. Zhang aumentó de 110 kilogramos a 140 kilogramos. Finalmente, a la Sra. Zhang le diagnosticaron diabetes gestacional y tuvieron que realizarle una cesárea en la fecha prevista porque el bebé era demasiado grande. Lo más inaceptable es que después de que nace el bebé, los ojos no solo no son grandes, sino también tan pequeños como una rendija.
La razón es muy simple: comer demasiadas uvas durante el embarazo es un alimento con alto contenido de azúcar que puede provocar la aparición de diabetes gestacional y el nacimiento de "macrosomía". Si un niño nace gordo, sus ojos seguramente parecerán más pequeños. La diabetes gestacional no es una broma, además de provocar un desarrollo fetal anormal, también puede provocar un aborto espontáneo en casos graves, ¡así que debes prestar atención!
Por supuesto, aunque las uvas no pueden mejorar los ojos grandes de tu bebé, comerlas con moderación sigue siendo beneficioso. Especialmente el período de uno a cuatro meses es el período más crítico para los cambios en la visión de un niño. Y comer más nueces, frutas y verduras ricas en vitaminas y minerales es excelente tanto para la mujer embarazada como para el bebé en el vientre.
Otro punto que es especialmente importante: no trasnochar ni comer comida picante, esto no es bueno para el desarrollo ocular de tu bebé.