Karl Jaspers, ¿qué es la educación?
La llamada educación no es más que la comunicación entre las personas (especialmente entre la generación mayor y la generación más joven), incluida la enseñanza del contenido del conocimiento, la comprensión de la connotación de la vida, la regulación de la voluntad. y comportamiento, y a través de La función de transmisión cultural imparte herencia cultural a la generación más joven, permitiéndoles generar libremente e iluminando su naturaleza libre. Por lo tanto, el principio de la educación es guiar la fuente y el fundamento del despertar del alma humana a través de todas las culturas del mundo existente, en lugar de guiar las cosas derivadas de lugares originales y conocimientos mediocres (por supuesto, las habilidades como base de la educación, en además del lenguaje y el contenido de la memoria). La verdadera educación nunca permite el aprendizaje de memoria, ni espera que todos se conviertan en pensadores reflexivos. El proceso de educación es permitir que los educados practiquen, aprendan y crezcan en la práctica. Las características de la práctica son el juego libre y la experimentación continua.
La educación es la educación del alma humana, más que la acumulación de conocimiento y cognición racionales. A través de la educación, las personas talentosas pueden elegir y decidir quiénes quieren ser y captar los fundamentos de sus vidas. Cualquiera que simplemente se limite al aprendizaje y la cognición, incluso si tiene una gran capacidad de aprendizaje, tendrá un alma deficiente y enferma.
Los profesores inspiran a los estudiantes a tener un sentido de responsabilidad al explorar el conocimiento y fortalecen este sentido de responsabilidad. Es decir, es necesario despertar el poder potencial de los estudiantes y animarles a generar un poder automático desde dentro en lugar de ejercer presión desde fuera.
La educación es una empresa sumamente seria y grandiosa. A través de la capacitación, continuaremos acercando a la nueva generación al excelente espíritu cultural de la humanidad, permitiéndoles vivir, trabajar y comunicarse con un espíritu completo. En este tipo de educación, los profesores no sólo hacen su trabajo con una actitud especulativa, sino que sirven a una generación de todo corazón: un trabajo estable y continuo.
El futuro de una nación depende de la educación de los padres, la educación escolar y la autoeducación. Cómo forma una nación a los maestros, cómo los respeta, en qué atmósfera, según qué estándares de valores y la vida sexual evidente, todo esto determina el destino de una nación.