Prevención de enfermedades infecciosas en invierno
En invierno, el clima es seco y la temperatura desciende. Si bien nos centramos en el mantenimiento de la salud y la alimentación, también debemos prestar atención a la prevención de enfermedades infecciosas. Durante este período de elevada incidencia de enfermedades infecciosas, debemos estar especialmente atentos a ocho enfermedades.
Cuidado con 8 enfermedades infecciosas en invierno
1. Gripe
Es una enfermedad infecciosa respiratoria aguda causada por el virus de la influenza. La estructura antigénica del virus determina sus características de rápida mutación y fuerte infectividad. Es una enfermedad sin fronteras y puede causar fácilmente epidemias explosivas o epidemias mundiales. Su tasa de incidencia ocupa el primer lugar entre las enfermedades infecciosas. La influenza afecta al 10% de la población mundial, o 600 millones de personas, cada año, y la mayoría de las muertes son causadas por sus complicaciones.
2. Meningitis cerebroespinal epizoótica
La meningitis cerebroespinal epizoótica es una enfermedad infecciosa respiratoria aguda causada por meningococos. La vía de transmisión es directa por gotitas respiratorias y la fuente de infección son los portadores y los pacientes. La población es generalmente susceptible, especialmente los lactantes de 6 meses a 2 años. Se caracteriza por una aparición inicial de fiebre leve, dolor de garganta y tos, seguida de fiebre alta repentina, dolor de cabeza intenso, vómitos frecuentes, petequias e irritación meníngea. Tiene un inicio agudo, una rápida propagación, una alta tasa de mortalidad y síntomas atípicos en ancianos y niños.
Sarampión
El sarampión es una enfermedad infecciosa respiratoria aguda causada por el virus del sarampión y es altamente contagiosa. Los pacientes con sarampión son la fuente de infección y se transmiten principalmente directamente a través de gotitas en el aire, pero también pueden transmitirse indirectamente a través de objetos contaminados con el virus. Las personas son generalmente susceptibles, especialmente los bebés y los niños pequeños. Las principales manifestaciones clínicas son fiebre, secreción nasal, tos, congestión conjuntival, manchas de Coriolis en la mucosa oral y erupción maculopapular roja en la piel.
4. Rubéola
La rubéola es una enfermedad infecciosa respiratoria aguda causada por la infección por el virus de la rubéola. Se transmite principalmente a través de gotitas de aire y la fuente de infección son los pacientes. Los grupos susceptibles son más comunes en niños de 65, 438 0 a 5 años y también se pueden observar en adultos. Los síntomas son fiebre, una erupción que se propaga rápidamente desde la cara y el cuello y aparece en 1 día. Algunos casos se acompañan de síntomas leves del tracto respiratorio superior y gastrointestinal, esplenomegalia y linfadenopatía superficial.
5. Varicela
La varicela es una enfermedad infecciosa respiratoria aguda causada por el virus varicela-zoster y se transmite fácilmente a través del tracto respiratorio o por contacto diario. Los grupos susceptibles son principalmente niños en edad escolar y un pequeño número de adolescentes, que son altamente contagiosos. El inicio es rápido, con fiebre, dolor de cabeza, malestar general, pérdida de apetito, tos y otros síntomas como primeros síntomas, seguidos de una erupción. Generalmente aparece primero en la cara, cuero cabelludo y tronco, con distribución centrípeta. En un mismo paciente pueden coexistir eritema, pápulas, herpes y costras, y algunas se acompañan de neumonía y encefalitis. En personas inmunocomprometidas, puede ocurrir varicela diseminada progresiva.
6. Paperas
La papera es una enfermedad infecciosa respiratoria aguda causada por el virus de la parotiditis, denominado paperas o paperas, comúnmente conocida como “paperas”. Esta enfermedad es común en niños y adolescentes, especialmente aquellos de 5 a 9 años. La propagación de gotitas de secreciones nasofaríngeas puede provocar fiebre y la temperatura corporal puede aumentar hasta 39-40°C. El agrandamiento de la glándula parótida, inflamación difusa de toda la glándula costal centrada en el lóbulo de la oreja, también puede extenderse al área submandibular. La zona hinchada es blanda y dolorosa, y el dolor empeora al abrir la boca o masticar. El conducto parotídeo no está enrojecido ni inflamado y no hay pus cuando se aprieta. Las glándulas parótidas bilaterales de personas de 70 a 75 años se inflaman al mismo tiempo, lo que puede evolucionar a meningitis, pancreatitis, nefritis, orquitis, ooforitis, etc.
7. Tuberculosis
Es causada por Mycobacterium tuberculosis. La infección del tracto respiratorio es la principal vía de infección de la tuberculosis y la infección por gotitas es la vía más común. La principal fuente de infección son los pacientes con tuberculosis que han eliminado bacterias. Las personas sanas se infectan al inhalar las gotitas del paciente al toser o escupir. El grupo de edad entre 15 y 35 años es la edad en la que la tuberculosis es más común. La tuberculosis pulmonar típica tiene un inicio lento y una evolución prolongada, que se manifiesta como febrícula, fatiga, pérdida de apetito, tos con una pequeña cantidad de hemoptisis, enrojecimiento facial y pérdida de peso. Sin embargo, la mayoría de los pacientes tienen lesiones leves y no presentan síntomas evidentes, y en ocasiones se descubren durante exámenes de salud con rayos X. A algunos pacientes se les diagnosticó hemoptisis repentina.
8. Enfermedad de manos, fiebre aftosa
Varios virus pueden causar la enfermedad de manos, fiebre aftosa. Los más comunes son el enterovirus 71 y el coxsackievirus a16, que son un tipo de enterovirus.
La fuente de infección es el paciente y se transmite a través del líquido del herpes, secreciones de la garganta, manos, juguetes y utensilios contaminados con heces. La enfermedad de manos, pies y boca afecta principalmente a niños menores de 4 años. Las principales manifestaciones clínicas son herpes oral, herpes de manos y pies con fiebre. Un pequeño número de pacientes puede complicarse con meningitis aséptica o viral, con síntomas como fiebre, dolor de cabeza y dolor de cuello o espalda. Otras complicaciones comunes son miocarditis, encefalitis o meningitis y neumonía. Generalmente, el curso de la enfermedad es leve y corto, y la recuperación se produce en más de 1 semana.
Seis pequeñas formas de prevenir enfermedades infecciosas
1. Cuando el cuerpo humano se resfría, los vasos sanguíneos del tracto respiratorio se contraen, el suministro de sangre disminuye, la resistencia local disminuye y el virus invade fácilmente. Al salir, trate de permanecer en un área bien ventilada y trate de evitar ir a lugares públicos concurridos.
2. Tiempo regular de trabajo y descanso. Dormir lo suficiente puede eliminar la fatiga, regular diversas funciones del cuerpo humano y mejorar la inmunidad.
3. Purificar el ambiente. Mantenga la circulación del aire; trate de no cerrar las cortinas y dejar que el sol entre en la habitación, porque los rayos ultravioleta del sol tienen un efecto bactericida. También puede utilizar vinagre para fumigar la habitación para lograr un efecto desinfectante;
4. Fortalecer el ejercicio y mejorar la condición física. El ejercicio físico puede mejorar la circulación sanguínea y mejorar la inmunidad.
5. El invierno es seco, por lo que conviene beber más agua caliente. Consuma más verduras y frutas frescas para complementar las vitaminas, especialmente la vitamina C, que tiene cierto efecto sobre los resfriados. Al mismo tiempo, los productos de soja, el pescado, los camarones y los huevos pueden proporcionar huevos de alta calidad, mejorando así la resistencia del cuerpo a las enfermedades.
6.Prevención inmunológica. Puede acudir a una estación de prevención de epidemias o a un hospital habitual para recibir la vacuna correspondiente.
En resumen, las ocho enfermedades infecciosas anteriores deberían ser las más vigilantes en invierno. Si no ajusta su cuerpo a tiempo y mejora su resistencia, lo más probable es que sea el primero en sufrir estas enfermedades.