Una breve historia sobre amar la vida
Helen Keller nació el 27 de junio de 1880 en Tuscumbia, un pequeño pueblo del norte de Alabama. De repente sufrió una enfermedad congestiva cerebral aguda cuando tenía un año y medio. Sufrió fiebre alta durante días y cayó en coma. Cuando despertó, tenía los ojos y los oídos quemados.
Debido a la pérdida de audición, no podía corregir sus errores de pronunciación y hablaba con dificultad. Para una persona discapacitada, el mundo es oscuro y silencioso. En tales circunstancias, es simplemente imposible aprender a leer, escribir y hablar sin una buena memoria.
Sin embargo, Helen Keller no cedió al destino. Para pronunciarlo con claridad, ató una pequeña cuerda a una varilla de metal, se la llevó a la boca y sostuvo el otro extremo en la mano. Practicó escribir una palabra y pronunciarla con las manos y la boca.
Para evitar que las palabras escritas queden torcidas, también hizo un marco de madera y montó una polea para practicar la escritura. Por supuesto, la profesora Anne Sullivan también hizo una gran contribución. Le pidió a Helen que pusiera su mano. En su garganta, Helen sintió el sonido vibrante de su voz.
El 3 de marzo de 1887 fue un día muy importante para Helena. Ese día, la familia invitó a una maestra para ella: la señorita Anne Sullivan.
La maestra Sullivan era muy cercana a Helen Keller. Se llevaban bien a los pocos días de conocerse, y Helen Keller también aprendió a leer de la maestra Sullivan, para poder comunicarse con los demás. y enseñándole el significado de algunas palabras nuevas, poco a poco aprendió sobre las flores, el agua, el sol, etc., y creyó que el amor es la cálida luz del sol. Más tarde, a Helen le enseñaron Braille y la etiqueta básica de la vida.
Información ampliada:
La contribución de Helen Keller
El compromiso de Helen Keller con el socialismo surge de su experiencia especial como persona discapacitada y de su compasión por otras personas con discapacidad. . Al principio, simplificó el alfabeto para hacerlo adecuado para personas con discapacidad, pero pronto se dio cuenta de que simplemente resolver el problema de la ceguera era tratar los síntomas y no la causa raíz.
A través de la investigación, descubrió que las personas ciegas no están distribuidas aleatoriamente entre varias poblaciones, sino que se concentran en la base de la sociedad. Las personas pobres tienen más probabilidades de perder la vista debido a accidentes de parto o a un tratamiento médico inadecuado.
Algunas personas pobres se convirtieron en prostitutas, añadiendo otro peligro de ceguera causada por la sífilis. Como resultado, Keller se dio cuenta de que los sistemas de clases sociales controlan el destino de las personas en la vida, y a veces incluso determinan si se quedarán ciegas. La investigación de Keller no fue de estilo estudio: "Visité tiendas de dulces, fábricas y barrios marginales. Incluso si no puedo verlo, puedo olerlo".
Enciclopedia Baidu - Helen Keller
Enciclopedia Baidu: La historia de Helen Keller