La Red de Conocimientos Pedagógicos - Aprendizaje de redacción de artículos/tesis - Desarrollar buenos hábitos de comportamiento es la base de nuestras vidas.

Desarrollar buenos hábitos de comportamiento es la base de nuestras vidas.

Tanto los buenos como los malos hábitos tienen un poder tremendo. Los buenos hábitos hacen que las personas sean invencibles, mientras que los malos hábitos hacen que las personas caigan del trono del éxito. Napoleón Hill pensó que las palabras de Paul Getty tenían sentido. .

Es sólo cuestión de tiempo si eres rápido o lento. Una persona se acostumbrará a ser puntual o se acostumbrará a llegar tarde. Una persona puntual siempre se dará cuenta de los beneficios de este hábito, ya sea una cita, una reunión u otro compromiso. Si alguien te invita a cenar y llegas tarde, causará molestias al anfitrión y a los demás invitados. Puedes volverte tan impopular que la gente nunca más te invitará a cenar. Napoleón Hill creía que para los empresarios la puntualidad era un activo especialmente valioso. Como dice el refrán, “el tiempo es oro” siempre es cierto. Hoy en día, este principio es más importante que nunca. El ritmo de las empresas modernas es rápido y cada segundo cuenta. Los supervisores y el personal superior tienen un horario completo todos los días porque no tienen tiempo extra que perder, al igual que la línea de producción no puede retrasarse. La confiabilidad es una virtud poco común para los empresarios. Los empresarios y empresas más prometedores deben recibir los pedidos a tiempo, responder a los envíos a tiempo, prestar servicios, pagar a tiempo y pagar las deudas a tiempo. Si el tiempo de espera ha pasado y el pedido no ha llegado, es posible que el cliente no acuda a usted la próxima vez. La frugalidad es otro hábito que se puede desarrollar. Para las personas que son frugales por naturaleza, este hábito les brindará más posibilidades de éxito que otros. Las personas que están acostumbradas a ser ahorrativas sólo saben que deben prestar atención a recortar gastos y costos cuando les importa. En la ferozmente competitiva sociedad empresarial actual, incluso si se ahorra en pequeñas cantidades y se acumula un poco, los ahorros finales serán considerables. Incluso puede resultar en una diferencia en ganancias o pérdidas. El hábito más valioso para cualquier empresario que recién inicia un negocio es revisar su razonamiento antes de tomar una decisión. Esta comprobación final puede durar sólo unos minutos o incluso segundos, pero puede resultar muy gratificante. Puede brindarles a las personas la oportunidad de organizar sus pensamientos y recordar por qué tomaron esa decisión. Un proceso aparentemente tan simple es en realidad muy útil. Es como esos actores muy famosos del mundo. Antes de cada actuación, aunque ya están familiarizados con sus roles, todavía tienen que cerrar el guión y revisar rápidamente sus roles en sus mentes. Napoleón Hill se mostró positivo sobre el "secreto de formar el hábito". Pensó que cualquiera podría alejarse por un minuto para ordenar sus pensamientos con calma por última vez antes de tomar una decisión.