La Red de Conocimientos Pedagógicos - Aprendizaje de redacción de artículos/tesis - Criar niños y plantas

Criar niños y plantas

Criar hijos es como cultivar plantas.

Los hijos biológicos son plantas que crecen a partir de semillas. Siembre una semilla y observe cómo brota, le crecen más hojas y raíces más fuertes. Rocíelo con agua, cambie la maceta y espere que crezca y florezca todos los días.

Los niños que vinieron a verme después ya eran plantas en macetas. Algunas tienen sus raíces dañadas durante su crecimiento y otras se ven afectadas por influencias ambientales adversas. No seas impaciente al cultivar una planta como esta. Sólo regando abundantemente la raíz, permitiendo que su sistema radicular se integre estrechamente con el suelo al que se adherirá durante mucho tiempo en el futuro, y luego cuidándolo, podrá sobrevivir sanamente.

Hay miles de tipos de plantas y los métodos de cultivo de las distintas plantas también son diferentes.

Los niños son únicos y los métodos educativos adecuados para ellos también son diferentes.

Algunos niños son como los girasoles. Las semillas pequeñas, esparcidas casualmente y demasiado perezosas para cuidarlas, se convertirán en racimos de hermosas flores en poco tiempo. Este tipo de flor no sólo tiene un largo período de floración, sino que también tiene un calendario regular: florece cuando sale el sol y regresa a casa cuando se pone.

Algunos niños son como un cuenco de flores de loto. Los brotes verdes que se arqueaban desde la cáscara dura gradualmente se hicieron más largos, y finalmente un día aparecieron la segunda y tercera plántulas verdes. Si se trasplanta a una maceta poco profunda en este momento, su espacio vital no podrá satisfacer sus necesidades de crecimiento en poco tiempo. Al final, las raíces pueden pudrirse o pueden crecer sólo hojas pero no flores. Si la pones en una maceta lo suficientemente profunda y grande y le das un espacio amplio, con el tiempo se convertirá en una hermosa flor con un ambiente tranquilo.

Algunos niños son como un bálsamo. Durante el cultivo, las exigencias al suelo no son elevadas, siempre que tenga una fuerte permeabilidad al agua. Cuanto más gestionas la planta, peor se vuelve. Demasiada agua provocará la pudrición de las raíces y demasiado fertilizante matará. Como mantenedor, ser vago lo hace más saludable.

En comparación con otras plantas fuera del jardín, las plantas que cultivamos no son las mejores, pero son únicas porque las cultivan poco a poco ellas mismas. Los niños también. Lo amo no sólo porque lo di a luz, sino también porque puse mucho esfuerzo en él. Aun así, debemos darnos cuenta claramente de que cada niño tiene sus fortalezas únicas. En lugar de seguir ciegamente las enseñanzas de otras personas, es mejor calmarse y ser un pequeño jardinero en el camino de crecimiento de su hijo. Riegue cuando sea el momento de regar, pode cuando sea el momento de podar y deje que el tiempo haga el resto.