Silbatos y señales con las manos de los árbitros durante los partidos de fútbol
El silbato es la señal principal que tiene el árbitro para guiar el juego. Detener el juego no es sólo una orden. El hecho de que el silbato se utilice de forma precisa, oportuna, clara y decisiva a menudo afecta las emociones de los atletas y los espectadores. Los silbatos precisos y oportunos definitivamente resonarán en la gente dentro y fuera del campo y aumentarán el sentido de confianza en el árbitro. Por el contrario, la mala precisión, los silbatos inoportunos y los silbatos redundantes inevitablemente causarán resentimiento y disgusto dentro y fuera del juego; Por lo tanto, como árbitro, si tienes un silbato en la mano, debes ser plenamente consciente de que cada silbido está relacionado con si todo el juego puede desarrollarse sin problemas.
(1) Varias situaciones en las que se debe hacer sonar el silbato durante el partido.
En función de las necesidades de la competición, se deben minimizar las denuncias innecesarias. En la actualidad, en las competiciones nacionales, varias situaciones que requieren denuncia de irregularidades y los requisitos para denunciar irregularidades se unifican de la siguiente manera:
1. El juego comienza (incluido un equipo que gana un gol y reinicia el juego). Silbato, el silbido es más largo.
2. El final del tiempo de juego (incluido el final de la primera mitad o todo el tiempo de juego). Dos o tres silbidos cortos, seguidos de un largo aullido.
3. Darle un objetivo a un equipo. Un largo rugido.
4. Lanzar un penalti. Silbato, el silbido es más largo.
5. En caso de falta u otra situación, el árbitro deberá hacer sonar el silbato a tiempo cuando se suspenda el juego.
Además de las cinco situaciones anteriores, si el balón sale fuera del campo o la línea de meta queda muerta, cuando se reinicia el juego, tales como saques de banda, tiros libres, saques de meta, saques de esquina, y abandonos de árbitros, sin bocinazo. En circunstancias especiales, el silbato podrá sonar según corresponda, tales como:
(1) El balón ha cruzado la línea lateral o la línea de meta, pero los jugadores no han dejado de jugar. El árbitro deberá silbar para indicar que el balón está fuera del campo.
(2) Al reanudar un saque de set, si hay alguna violación de las reglas, el árbitro puede informar la situación.
Señal de silbato.
(3) Cuando el equipo atacante lanza un tiro libre cerca o en la zona defensiva, el árbitro corregirá al equipo defensor para que retire el balón.
En el recorrido de 9,15 metros es necesario dejarlo claro a ambas partes y utilizar señales para reanudar el juego tras la corrección. Esta señal se puede dar con un silbido o un gesto claro con la mano.
(2) Métodos y requisitos para hacer sonar el silbato
Como se mencionó anteriormente, el silbato es la señal principal utilizada por el árbitro y debe ser precisa, oportuna, nítida y decisiva. Aunque el silbato no puede sustituir el lenguaje complejo, es suficiente para expresar en gran medida si el árbitro está decidido y confiado a la hora de entretener a los árbitros. En términos generales, los requisitos para los silbidos de los árbitros son que el silbato sea nítido y potente, y que la intensidad sea moderada sobre la base de decisiones de penalización oportunas y precisas. Por ejemplo, el pitido al inicio del partido, al final del partido o cuando el equipo marca un gol debe ser un poco más largo, pero también debe ser moderado. Si es demasiado largo, resultará redundante y molesto. Por poner otro ejemplo, los pitos por faltas deben distinguirse según la gravedad de la falta. Si se trata de una falta general, basta con utilizar un silbido moderadamente largo, nítido y potente; si hay una falta brusca y grave, se utilizará un sonido fuerte y repentino para mostrar la majestuosidad de las reglas. Aunque no se utilizan palabras, se le dice al jugador infractor que "su falta es bastante grave". El silbato en sí servirá como advertencia para el jugador infractor.
Reducir los pitos innecesarios es un arte al que los árbitros deben prestar atención en la cancha. Para mejorar la "majestuosidad" del silbato, los árbitros primero deben "purificar el ruido" ellos mismos. Cuando algunos árbitros cometen una falta, están acostumbrados a hacer sonar el silbato de forma trivial y continua después de tocar un silbato largo. A veces, para corregir un pequeño error al ejecutar un saque de balón, el silbato también es trivial, continuo y fuerte. Estos silbidos innecesarios sólo arruinarán la atmósfera del juego y son extremadamente indeseables.
(3) Cómo sostiene el árbitro el silbato
Hay dos formas en que el árbitro sujeta el silbato:
Una se coloca alrededor del cuello y se coloca en el silbato al correr En la boca. La característica de este método es que hace sonar el silbato rápidamente y no requiere ningún proceso de preparación desde el momento en que decides hacer sonar el silbato. Pero la desventaja es que el árbitro es demasiado sensible a la feroz competencia y hace sonar el silbato de repente. Para algunas faltas triviales, no utilizará términos favorables para castigar, pero el silbato ha sonado irrevocablemente. Otra desventaja es que resulta incómodo mantener el silbato en la boca al correr y también tiene un cierto impacto en la dificultad para respirar.
La otra es colgarlo en la muñeca y sostenerlo en la mano al correr. La característica de este método es que es conveniente para correr y no tiene ningún efecto sobre la dificultad para respirar durante la carrera. Cuando el árbitro ve una falta, hasta que suena el silbato, hay un proceso momentáneo de pensamiento y reobservación sobre si concede un penalti o aplica condiciones favorables para evitar la desventaja de hacer sonar el silbato repentinamente.
Los dos métodos anteriores son solo métodos centinela y no existen regulaciones ni requisitos unificados para las asociaciones de fútbol y las asociaciones de fútbol en todos los niveles. Sin embargo, la práctica a largo plazo ha demostrado que el segundo método mencionado anteriormente tiene ventajas obvias y ha sido ampliamente utilizado por árbitros nacionales e internacionales.
2. Gestos del árbitro
Los gestos utilizados por los árbitros de fútbol deben ser sencillos, claros y precisos, dando a las personas una sensación directa y clara. El uso de estos gestos tiene como objetivo que el juego fluya sin problemas. La función principal de los gestos es indicar cómo se debe jugar el siguiente juego. Por lo tanto, los árbitros generalmente no necesitan imitar las acciones faltas de los jugadores.
Los gestos y otras conductas de un árbitro de alto nivel deben ser concisos, sencillos, relajados, generosos e inspiradores. Cualquier simulación, postura, exposición personal y uso de gestos y silbatos para impresionar al público no sólo diluirá la atmósfera del juego, sino que también inevitablemente atraerá el desprecio, reduciendo así el prestigio del árbitro.
Los gestos unificados de los árbitros aprobados por la FIFA son los siguientes:
(1) Tiro libre directo: levantar un brazo hacia un lado para indicar claramente la dirección del tiro.
(2) Tiro libre indirecto: Levantar un brazo hacia arriba, con la palma hacia adelante. Este gesto debe continuar hasta que el balón sea expulsado, tocado por otro jugador en el campo o muerto.
(3) Tiro: Levantar un brazo en diagonal hacia adelante y señalar el área de portería donde se va a ejecutar el tiro.
(4) Saque de esquina: Levantar un brazo en diagonal, apuntando a la zona del saque de esquina donde se ejecuta el saque de esquina.
(5) Tiro penal: Levantar un brazo en diagonal hacia adelante, apuntando claramente al punto penal donde se ejecuta el tiro penal.
(6) Señal de continuación del juego: Después de que un jugador cometa una falta, cuando el árbitro utilice la cláusula ventajosa de no penalizar puntos, deberá dar una señal de continuar el juego: levantar los brazos hacia adelante y Agite ligeramente el brazo hacia adelante de forma continua.
(7) Ordenar a los jugadores que jueguen y dar advertencias: Al ordenar a los jugadores jugar o dar advertencias, se deben mostrar tarjetas rojas y tarjetas amarillas respectivamente. Al utilizar tarjetas rojas y amarillas, se deben estirar los brazos y levantar las manos, de cara al jugador sancionado. Hay una breve pausa para permitir que todos dentro y fuera del campo vean qué jugador ha sido sancionado.