Un artículo sobre la epidemia en el suelo
No tengas miedo a la epidemia y afrontalo todo con calma. Cuando llegue la epidemia, no deberíamos preocuparnos demasiado. Mientras tomemos una buena protección personal, participemos activamente en las pruebas de ácido nucleico y nos vacunemos a tiempo, no hay nada que temer del COVID-19. En la actualidad, debes cuidar tu seguridad personal, obedecer órdenes y arreglos y no ser egoísta. No transmitas comentarios negativos, mantén una buena actitud y afronta todo con valentía.
No te rindas, no te rindas y no olvides perseguir tus sueños durante la epidemia. Después de la epidemia, aunque haya afectado nuestro trabajo, estudio y vida, no debemos desanimarnos y perseguir siempre nuestros sueños. Mientras tengas un sueño en tu corazón, debes trabajar duro para perseguirlo. En ningún momento debes rendirte o abandonarlo. Mientras se trabaje duro, la epidemia no podrá obstaculizar nuestro progreso. Después del brote, aunque ya no pueden trabajar y muchas personas están suspendidas en casa, pueden realizar algunos trabajos a tiempo parcial. Mientras tengas fe en tu corazón, algún día tendrás éxito. Durante la epidemia, no debemos relajar nuestra gestión. Debemos seguir aprendiendo y aferrándonos a nuestros sueños.
Vive una vida positiva y optimista, desarrolla un tiempo regular de trabajo y descanso e insiste en controlarte todos los días. Cuando ocurre la epidemia, debes controlar tu salud, insistir en controlarte todos los días y hacer ejercicio todos los días. Acuéstese temprano y levántese temprano todos los días. No empieces a ser perezoso y carente de autodisciplina solo porque no puedes salir a trabajar durante la epidemia. Terminarás haciéndote un flaco favor si te quedas despierto hasta tarde todas las noches. Debemos vivir una vida positiva y optimista. La vida y el trabajo acaban de presionar el botón de pausa, pero el ambiente es diferente, por lo que conviene vivir bien durante el período de aislamiento domiciliario. Podemos utilizar este tiempo para planificar nuestras vidas. ¿Cómo viviremos y trabajaremos una vez que termine la epidemia?