Dios mío
Estoy bien, pero tengo un mal hábito: ¡regañar a mi Dios! ¡No lo subestimes, es famoso por su clase suprema! ¡Todos los novatos de la clase lo han disfrutado! )
Tome uno de ellos como ejemplo. Mi maestro me pidió que me sentara en el rey de las tonterías: "Chicken Chin" (un apodo), y mi mantra volvió a surgir: ¡Dios mío! Mi buen momento está a punto de arruinarse con tu "barbilla de pollo estofada". ¡Oh Dios mío! ¡Oh Dios mío! "Chicken Chin" ha escuchado durante mucho tiempo mi súper mantra: "Tu Qiankun (Dios mío) debería conmoverme hasta la muerte, ¿verdad?" ¡sí! ¡sí! ¡Ey! "¡Ay dios mío!" Cuando conozco a un novato como tú, tengo que tragarme mi ira. (Otro eslogan)
En otra ocasión, nuestro monitor de clase dijo: "Hu Yan, lee el cuarto párrafo".
Leí: "Siempre quise comprar una novela —— Joven guardia. ¡Dios mío! ¡Estamos en el siglo XXI y todavía lees este tipo de libros! ¡Dios mío! ¿Es más de un yuan?
Nuestro líder de escuadrón apretó los puños y dijo: "Mujer, estoy impresionado". ¡Este movimiento tuyo realmente va a matar gente! ¡Guau, te admiro mucho!
¡Oh, Dios mío! ¡Parece que nunca podré cambiar mi mantra!