Introducción al budismo: ¿Cuándo comenzó a quemar incienso y adorar a Buda?
Buda Sakyamuni, el fundador del budismo, es el precursor de la vida de sabiduría. Entremos gradualmente en el budismo a través de la meditación, como una luz brillante en la noche oscura, ayudando a innumerables seres sintientes que sufren. El Buda Sakyamuni era hijo de una gran piedad filial. Para salvar a su madre, pasó treinta y tres días hablando de la vida. Un día en el cielo y mil años en el mundo humano Los discípulos estaban preocupados de que Buda estuviera lejos de la vida humana, por lo que quemaron sándalo y madera de agar como muestra para invitar a Buda a regresar al mundo humano. A partir de entonces, los budistas comenzaron la costumbre de quemar incienso y adorar a Buda.
El incienso budista es una especie de perfume elaborado a base de cortezas, resina, serrín, raíces, hojas, flores, frutos, etc. Hay incienso de sándalo, incienso de agua, incienso de clavo, incienso de tulipán, incienso de borneol (las cinco especias anteriores), incienso, benjuí, etc. Debido a que el budismo respeta la vida y protege los seres vivos, generalmente no utiliza ámbar gris ni almizcle secretados por los animales. La mayoría de los perfumes populares en la sociedad actual son artificiales y tienen muchos efectos secundarios.
Existen dos tipos principales de incienso: el incienso quemado y el incienso pintado. Quemar incienso es utilizar la fragancia para purificar el cuerpo y la mente después de quemar el incienso, por eso también se le llama incienso. Las especias utilizadas incluyen incienso de torre, incienso en pastillas, incienso suelto, incienso final (en polvo), incienso refinado e incienso en cuerdas. La aplicación de perfume consiste en aplicar perfume sobre objetos o cuerpos para lograr el efecto de purificar el cuerpo y la mente. Se utilizan perfumes, aceite de sésamo, fragancias medicinales, etc. En el pasado, el bálsamo y la sopa también se usaban para bañarse, o se ponían especias en bolsitas y almohadas para hacer bolsitas y almohadas, que son naturalmente fragantes y logran el efecto de limpiar el medio ambiente, disipar el mal y evitar la suciedad.
En cuanto a las funciones del incienso budista, la primera es utilizar el incienso como muestra de adoración; la segunda es expresar identidad con las especias preciosas; la tercera es desodorizar y embellecer fragantemente el ambiente; es refrescar la mente y cultivar los sentimientos; el quinto es ayudar a calmar la mente y practicar la meditación; el sexto es disipar los encantos, el nacimiento, la vejez, la enfermedad y la muerte; el séptimo es oler el incienso y desodorizar, purificar; el cuerpo y la mente; el octavo es repeler mosquitos e insectos; el noveno es retroceder y tiempo.