¿Por qué me ha despertado la más mínima vibración de mi teléfono, por fuerte que sea, durante los últimos seis meses? Al principio pensé que era sueño. ...
Causas de la somnolencia 1. Las razones más comunes
No dormir bien por la noche, o dormir poco tiempo, o apnea del sueño, es decir, ronquidos y respiración intermitente mientras se duerme, que afecta la calidad del sueño con el tiempo, el biológico; El reloj está desordenado. La fatiga y la somnolencia, acompañadas de mareos y confusión, pueden ser síntomas de neurastenia temprana.
Causas de la somnolencia 2. Nutrición insuficiente y ingesta energética reducida.
Una nutrición insuficiente puede provocar fácilmente somnolencia y letargo. La suplementación con proteínas mejora la somnolencia. También existe la narcolepsia, que suele comenzar después de la pubertad. El síntoma principal es la somnolencia diurna, que se presenta independientemente de la hora y el lugar. Si habla con invitados o trabaja, tendrá narcolepsia. La narcolepsia generalmente no causa otras enfermedades orgánicas.
Causas de la somnolencia. Otras razones
1. La narcolepsia en los ancianos no es infrecuente. Hay muchos factores que causan la narcolepsia en los ancianos: factores ambientales, factores físicos, factores farmacológicos, factores cerebrales, etc., son causas comunes.
2. La obesidad y el sobrepeso en adolescentes o adultos jóvenes también pueden provocar somnolencia diurna excesiva;
3. Las personas con depresión tienen tres veces más probabilidades de sentir demasiado sueño durante el día.
La diabetes, la somnolencia diurna excesiva está muy relacionada con la diabetes. Las personas con diabetes tienen casi el doble de probabilidades de experimentar somnolencia diurna. Hipotiroidismo, los pacientes con tiroides a menudo sufren de somnolencia debido al bajo metabolismo basal.
Según las últimas estadísticas de la OMS: Niños de 12 países sufren narcolepsia tras recibir la vacuna contra la gripe A. Los niños locales desarrollaron narcolepsia después de recibir la vacuna contra la influenza A, y la probabilidad de que los pacientes se quedaran dormidos repentinamente era nueve veces mayor que la de aquellos que no recibieron la vacuna.