La Red de Conocimientos Pedagógicos - Conocimientos históricos - Por qué, si un estudiante de posgrado va a montar un puesto. ¿Abandonado por la cultura de la escuela secundaria?

Por qué, si un estudiante de posgrado va a montar un puesto. ¿Abandonado por la cultura de la escuela secundaria?

No podría estar más de acuerdo contigo. Es un acto valiente e innovador para los recién graduados montar un puesto y poner en marcha un negocio. No sólo es vergonzoso, sino que tiene muchas virtudes e implicaciones. Se analizará lo siguiente desde los siguientes cuatro niveles:

En primer lugar, el emprendimiento es una opción laboral positiva.

En la sociedad actual, ya sea en el contexto de la epidemia de COVID-19 que azota al mundo o de la presión laboral de la nueva era, los graduados se enfrentan a una competencia cada vez más feroz en el mercado laboral. La mayoría de los graduados suelen elegir métodos conservadores y confiables para buscar empleo, eligiendo métodos de empleo tradicionales como enviar currículums y asistir a ferias de empleo, pero es difícil obtener oportunidades laborales ideales. El espíritu empresarial no es sólo una nueva opción, sino también una forma eficaz de empleo. Los jóvenes emprendedores pueden montar puestos para iniciar sus propios negocios, llevar sus ideas y productos al mercado, atraer la atención de los inversores e iniciar sus propios negocios.

En segundo lugar, el espíritu empresarial puede promover el desarrollo social y económico.

El espíritu empresarial en sí mismo es un acto que promueve el desarrollo social y económico. Los emprendedores pueden transformar sus ideas y creatividad en productos o servicios con valor comercial, aportando así beneficios tangibles a la sociedad y a los consumidores. En este proceso, los emprendedores no sólo pueden aumentar su propio valor, sino también contribuir a la sociedad.

En tercer lugar, el espíritu empresarial favorece la mejora de las capacidades y cualidades personales.

Iniciar un negocio también es una buena forma de mejorar las capacidades y cualidades personales. En el proceso de iniciar un negocio, los emprendedores deben poseer muchas cualidades, como capacidad de innovación, capacidad de gestión, capacidad de marketing, etc. En el proceso de iniciar un negocio, los emprendedores necesitan construir su propia estructura empresarial, coordinar la comunicación y la cooperación internas, organizar los recursos, etc., lo que puede capacitar el trabajo en equipo, la comunicación, el liderazgo y otros aspectos de los emprendedores. Al mismo tiempo, el espíritu empresarial también requiere aprendizaje y reflexión continuos, y un ajuste y mejora constantes de las propias ideas y acciones, lo que también puede ayudar a los emprendedores a mejorar continuamente sus propias cualidades y habilidades.

En cuarto lugar, iniciar un negocio es para ti, no para los demás.

El "yo" mencionado aquí no es un individuo en un sentido estricto, sino que se refiere al comportamiento de emprendedores que pueden transformar sus talentos y pasión para crear nuevo valor comercial. Los emprendedores pueden desafiarse constantemente a sí mismos en el proceso de iniciar un negocio y hacer realidad sus ideales y objetivos. Al mismo tiempo, los empresarios también pueden crear un nuevo estilo de vida para satisfacerse tanto financiera como espiritualmente.

Resumen:

Montar un puesto y poner en marcha un negocio para recién graduados es un acto positivo y valiente que puede aportar beneficios tangibles a ellos mismos, a la sociedad y a los consumidores. Deberíamos alentar a los jóvenes a que se atrevan a probar el espíritu empresarial, a correr riesgos y a practicar sus propias ideas y creatividad para hacer realidad sus propios valores y objetivos. Al mismo tiempo, también deberíamos ofrecer más apoyo y ayuda a los jóvenes para que puedan realizar mejor sus sueños empresariales.