Ushinsky aboga por la educación.
Desde un punto de vista democrático burgués, Ushinsky no estaba de acuerdo con la teoría de la "nación oficial" encaminada a mantener el sistema autocrático zarista, ni tampoco con la teoría de la "occidentalización total" que negaba las características rusas. Ushinsky cree que cada nación tendrá su propio sistema educativo, objetivos educativos y medios especiales para lograr este objetivo, que se reflejan en las características de cada nación.
Ushensky entendía "nacionalidad" como "las características de cada nación determinadas por su desarrollo histórico, sus condiciones geográficas y sus condiciones naturales". La nación es la única fuente de vida histórica nacional. La nacionalidad es también la base para establecer la educación nacional. La educación de cada nación se deriva de los conceptos educativos únicos formados por esa nación. Desde este punto de vista, Ushinsky se opone firmemente a copiar ciegamente sistemas educativos extranjeros que no tienen características nacionales. Cuando Ushinsky enfatiza la nacionalidad, no niega que la educación de diferentes nacionalidades tenga algunos puntos en común, ni excluye el aprendizaje de experiencias educativas extranjeras exitosas.
(2) Importancia práctica
A juzgar por la época en la que vivió Ushinsky, su principio de nacionalidad en la educación no fue sólo una refutación de la nacionalidad oficial, sino también un desafío a la Sistema de educación de siervos ruso Una protesta contra los malos hábitos de ignorar por completo las características nacionales y adorar a los países extranjeros.
En los tiempos modernos, el principio de nacionalidad de Ushinsky en la educación también es de gran importancia. Debería ser eterno enfatizar que la educación de un país debe satisfacer las necesidades de su sociedad y sus características nacionales. Porque la educación se basa en la sociedad y, al mismo tiempo, la educación promueve el desarrollo social. Si no satisface las necesidades de nuestra sociedad y las características de nuestra nación, no será posible promover el desarrollo de nuestra sociedad. Lo mismo ocurre con la actual reforma curricular en nuestro país. Tanto el concepto de reforma curricular como las medidas específicas de reforma curricular deben basarse en la realidad de nuestra sociedad y las características de nuestra nación, y no podemos copiar completamente las teorías y medidas occidentales.