Padres de escuela primaria
1. Mi querida hija, estoy feliz y feliz por tu crecimiento cada día, y cada vez me sorprende y conmueve tu progreso. Por su arduo trabajo, el partido y las ardientes expectativas del país de brindarle esta preciosa oportunidad, y el arduo trabajo y sudor de los maestros y compañeros que lo aman.
¡Debes estar agradecido con quienes te enseñan, apreciar a quienes te acompañan y estar siempre agradecido con quienes alimentan tu sinceridad y belleza y hacer realidad tus sueños uno tras otro!
El camino por delante puede ser largo y tortuoso, pero no importa las dificultades que enfrentes, debes mirarlas de manera objetiva y justa, y no esperar que la vida transcurra sobre ruedas. ¿Cómo puede haber un hermoso arcoíris sin pasar por el viento y la lluvia?
Mientras trabajes duro y tengas los pies en la tierra, ¡la vida nunca te decepcionará! Si no tienes miedo a las dificultades, debes conocer el verdadero significado de "¿Cómo se fabrica el acero?"
2. Mi querida hija, el camino está a tus pies. Tienes que dar un paso valiente, ignorarlo, trabajar duro, enfrentar el mundo con valentía, usar tu juventud para viajar y usar tu voluntad para explorar.
Solo recuerda: el camino es largo y largo, ¡así que sigue paso a paso! En el fondo, hay un par de ojos que siempre te observarán: estos son tus padres y te mantendrán silenciosamente en sus corazones.
3. En esta era, estás a punto de mirar hacia tu futuro, fíjate una meta, no te presiones, solo haz lo que quieras hacer. Porque no quiero que te arrepientas en el futuro, que te arrepientas de tu juventud en el futuro y la meta está turbia.
Tus objetivos incluyen tu inocencia, tus esperanzas y nuestras expectativas comunes. Esto es lo más maravilloso del mundo y trabajaremos juntos para lograrlo.