Un diario de 20 palabras sobre cómo hacer buenas obras en el cumpleaños de una escuela primaria
El domingo por la mañana fui feliz a la biblioteca. Había mucha gente allí. Tan pronto como entré, comencé a buscar mi libro favorito. De repente, un libro de información apareció ante mi vista. ¡Ah, esto es justo lo que necesito! Di un paso adelante rápidamente, listo para tomar el libro. Mientras esperaba en la fila de la biblioteca para pedir prestado este libro, una chica de mi edad entró corriendo por la puerta principal. Entró sudando profusamente y miró a su alrededor. Bajé la cabeza cuando la vi pidiendo un folleto informativo al personal. ¿No es este el libro que tengo en la mano? Pensé: ¡Pide prestado el libro en secreto! Pero luego pensé: esto no está bien. Al ver que está tan ansiosa, ¡déjela prestada! Con esta idea en mente, coloqué secretamente el libro en una estantería no lejos de ella.
Cuando la niña vio el libro, suspiró aliviada y felizmente lo pidió prestado. Al ver la sonrisa en el rostro de la niña, no pude evitar sonreír, como si ella conmoviera mi estado de ánimo y mi corazón se volviera muy alegre.
A través de este incidente, gradualmente entendí que "hacer una cosa buena todos los días" es en realidad muy simple de decir, pero en realidad es muy difícil de decir simplemente, depende de cómo lo hagas. Así que hoy decidí hacer una buena acción todos los días en mi vida futura, sin importar cuán grande o pequeña sea. La clave es la perseverancia. Haz una buena acción todos los días, empezando por mí.