Ensayo de cuento y verdad de 500 palabras
"Quack Quack"
En las calles de Vancouver, un grupo de patitos inocentes pasean por la ciudad bajo el liderazgo de su madre. Caminaron tranquilamente, atrayendo a los transeúntes a detenerse y mirar. Todos miraron al pato con curiosidad y asombro, y tomaron sus cámaras para tomar fotografías.
El patito miró este extraño lugar de manera muy extraña. Miró con curiosidad los altos edificios que se alzaban a ambos lados y la "pequeña casa" con cuatro ruedas que aún se movían. Miraron a su alrededor, pero no pudieron ver lo suficiente.
Unos pequeños patos vieron varios "grandes agujeros" negros al borde de la carretera y los rodearon. Oyeron el sonido del agua corriendo en el interior y les pareció gracioso. Un patito saltó emocionado, seguido de varios patitos. Inesperadamente, había suficiente agua en la alcantarilla para lavar al patito. El patito notó el peligro e inmediatamente pidió ayuda a su madre.
"Cuac-cuac-cuac" La mamá pato escuchó los gritos de sus hijos y corrió hacia la alcantarilla. Los patitos estaban parados en un pequeño claro de la alcantarilla, y el agua que corría estaba a punto de tragarse el claro restante. Los patitos junto a la mamá pato miraron el abismo sin fondo, entraron en pánico, perdieron brazos y piernas y el agua comenzó a subir. Pronto, los patitos serán devorados y los patitos morirán. Todos entraron en pánico. Qué estamos haciendo
En ese momento, Mamá Pata estaba muy tranquila y pensó en la patrulla que acababa de ver en la calle. Estaba tan ansiosa que mordió y llevó al patrullero al "lugar del accidente".
Los patrulleros comprendieron e inmediatamente iniciaron las operaciones de rescate. Los transeúntes también tendieron amablemente una mano y todos rápidamente sacaron a los patitos de la alcantarilla uno por uno.
El peligro pasó y los patitos escaparon. Mamá Pata les dio a todos un "cuac" para expresar su gratitud. Los patitos se recuperaron lentamente del susto y se acurrucaron junto a su madre.
Todos miraron al patito y a la madre pato. Comenzaron a caminar de nuevo por el camino. Todos miraron al pato y sonrieron felices.
La madre pato confió en el patrullero, pidió ayuda y salvó a su bebé. Nosotros también estamos contentos con esto. Esta historia nos hace pensar profundamente: los animales son nuestros amigos más cercanos y debemos vivir en armonía con ellos y ayudarnos unos a otros.