Contenido de educación sobre seguridad sobre cómo subir y bajar escaleras en el jardín de infantes
2. Presta atención, guarda silencio y ve de uno en uno.
3. Sube y baja escaleras paso a paso sin correr, saltar, empujar o empujar.
Problemas y contramedidas
1. Los movimientos son aburridos: sujetar el aro dorado.
Los jardines de infancia generalmente organizan clases pequeñas en el primer piso, pero los pequeños movimientos de los niños no son flexibles e incluso unos pocos pasos limitados son peligrosos. Algunos niños son demasiado tímidos y no se atreven a subir las escaleras. Los profesores pueden guiar a los niños a subir y bajar escaleras en un juego divertido. Por ejemplo, "El niño debería ser Sun Wukong, sosteniendo un aro dorado (pasamanos)". No sólo estimula el deseo de los niños de intentarlo, sino que también les proporciona el apoyo necesario. Además, organice a los niños de clases pequeñas para que vayan más lento al subir y bajar escaleras, y utilice canciones infantiles o lenguaje para recordarles que presten atención a la seguridad al caminar. Por ejemplo, "Sostenga sus manitas en los pasamanos, mantenga la vista clara en los escalones, mantenga la boca tranquila y siga uno por uno".
2. No en tándem: conviértete en un pequeño tren.
Los niños a veces se persiguen por los pasillos y en ocasiones se detienen a propósito. El profesor puede utilizar un tono lúdico para guiar a los niños uno a uno para no quedarse atrás. Por ejemplo, "Somos un trenecito. Cada vagón debe seguir al vagón de delante. No dejes que nuestro trenecito se rompa". O coloque hermosas huellas o números en cada escalera para guiar a sus hijos a contar a medida que avanzan.
3. "Travieso" y "pequeño": presta más atención y cuidado.
Algunos niños son activos, tienen poca autodisciplina, a menudo aparecen en situaciones peligrosas o son propensos a tropezar a una edad temprana. Esto requiere que los maestros presten más atención a estos niños y los coloquen al principio. o final de la cola.
4. Me va bien sin profesor.
En las clases media y grande suele haber más niños y los pisos son más altos. Los maestros pueden desarrollar una rutina para subir y bajar escaleras a través de discusiones grupales para cultivar la conciencia de autoprotección de los niños. Por ejemplo, deje que los niños hablen sobre "cómo subir y bajar escaleras de forma segura" y "posibles peligros en los pasillos". Para los niños que no pueden ser atendidos en el medio, el maestro puede organizar algunos niños disciplinados para que se alineen en el medio para alentar a otros niños a desarrollar el buen hábito de subir y bajar escaleras. Por ejemplo, los niños bajan las escaleras seguidos: están ansiosos. Si no me presionas, no apretaré ni jugaré felizmente. Los niños subieron las escaleras uno tras otro. No te preocupes, no te presionaré si tú no me presionas. Vuelve a clase felizmente.