¿Qué debo hacer si a mi hijo le gusta mentir?
Primero, debemos descubrir qué significa mentir. Mentir es una expresión verbal de engaño y engaño. Este tipo de engaño y engaño es sumamente inaceptable. En general, hay daño directo o indirecto al país y a la nación. Una frase es suficiente para arruinar la personalidad de una persona. Mentí. Primero, perdí mi autoestima. Una persona no puede vivir sin autoestima. Si pierde su autoestima y no se valora a sí mismo, se rendirá y hará cualquier cosa. El segundo es perder credibilidad y no recibir simpatía y ayuda de los demás. Había una vez una historia sobre "El pastor y el lobo". Se dice que el pastor mintió por primera vez. Cuando gritó "El lobo viene" a la montaña, otros lo escucharon y se apresuraron a perseguir al lobo, pero él se mostró complaciente, pensando que había engañado a otros una vez. No tenía idea de que tales mentiras hubieran sembrado las semillas de la deshonestidad. El verdadero lobo se acerca. Cuando entró en pánico y gritó "El lobo viene", la gente pensó que estaba mintiendo nuevamente y no vino a salvarlo, y finalmente el lobo lo mordió hasta matarlo. Como dijo Lincoln: "Se puede engañar a unos pocos, pero no se puede engañar a la mayoría; se puede engañar a unos pocos, pero no todo el tiempo". Los niños son inocentes y sencillos cuando son pequeños. Pero ¿por qué muchos niños aprenden poco a poco a mentir?
Mentir no es de ninguna manera accidental, pero debe ser un hábito de mentir, y la mayor parte de este hábito de mentir se desarrolla desde la infancia. Por tanto, si queremos evitar que los niños mientan desde una edad temprana, primero debemos entender las razones por las que los niños mienten. ¿Por qué mienten los niños?
(1) Los niños tienen miedo al castigo de sus padres o padres: algunos padres regañarán o golpearán a sus hijos para castigarlos cuando hagan algo mal. Los niños tienen miedo de ser regañados y golpeados, por eso mienten para encubrir sus errores y ser perdonados por sus padres. Entonces, cuando hacen algo mal por segunda o tercera vez, vuelven a mentir y piden perdón.
(2) Escape de la realidad: a veces, cuando los niños no quieren o no pueden hacer algo, lo llaman dolor de cabeza o dolor de estómago y utilizan diversas mentiras para engañar a sus padres. Por eso miento a menudo para eludir la culpa en el futuro.
(3) Buena reputación, orgullo: Un niño no hizo nada bueno, pero se dijo que lo hizo, obtuvo una recompensa y su rostro estaba brillante, por lo que en realidad mintió; Hice algo, pero no lo hice bien. Tenía miedo de perder la cara, así que dije que no lo hice y mentí.
(4) Codicia de ganancias: Muchos niños mienten para cotillear y comer; algunos niños hacen trampa en los estudios y exámenes para obtener altas puntuaciones o premios, e insisten en que sus habilidades son superiores a las de los demás. Esto es por avaricia.
¿Qué deben hacer los padres tras descubrir el motivo por el que sus hijos mintieron? ¿Cómo corregirlo y cultivar su hábito honesto?
En primer lugar, debemos entender a nuestros hijos: los padres deben saber qué están dispuestos a hacer sus hijos, qué pueden hacer y qué esperan conseguir. Comprenda la psicología y las habilidades del niño y luego déjelo hacerlo. En el proceso de hacerlo, los padres deben ayudarlo a descubrir problemas, superar dificultades y hacer las cosas con éxito. Dé ánimo cuando tenga éxito. Necesitamos eliminar su motivación para mentir y animarlo a hacer las cosas con honestidad.
2. Pistas apropiadas: Hay dos tipos de pistas. Una es una sugerencia positiva. Por ejemplo, hay dos niños juntos, uno es honesto y al otro le gusta mentir. Debemos elogiar y recompensar a los niños honestos, para que los niños que mienten se conmuevan y emprendan el camino de la honestidad. La otra es una contrapropuesta. Por ejemplo, si tu hijo viene a denunciarte algo, debes confiar en él y no decirle “de verdad, no me mientas”. Al decir esto, estás plantando una semilla de mentira en el corazón del niño, pensando que en la mentira se puede engañar y creer. Asegúrese de utilizar sugerencias positivas para impresionar a sus hijos y no utilice sugerencias negativas para motivarlos a mentir.
3. Dar ejemplo: Los padres deben dar ejemplo, hacer cosas honestas y no mentir delante de sus hijos. Debes saber que los niños son los más imitativos y ellos harán lo mismo. A veces los padres pueden contarle historias sobre niños honestos. Por ejemplo, cuando Washington era niño, cortó un cerezo. Un día, Washington cortó un cerezo en su jardín. Su padre se enteró de esto y se enojó mucho. Washington se apresuró a admitir que lo había cortado. Su padre no lo culpó, sino que lo elogió y lo animó a ser honesto en todas partes. De ahora en adelante, Washington haría todo honestamente, nunca mentiría y finalmente lograría grandes cosas. Cuéntele a su hijo una historia como esta y utilice a los personajes de la historia como modelos a seguir.
En general, debemos dar un buen ejemplo y nunca un mal ejemplo. Por ejemplo, una madre quiere jugar a las cartas pero no entretener a los invitados. Les dijo a sus hijos: "Si vienen invitados, pueden decir que mamá no está en casa". Cuando llegan los invitados, los niños mienten según las palabras de su madre: "Mamá no está en casa". Es fácil dejar que los niños desarrollen el hábito de mentir. Como puede engañar a los invitados según las palabras de su madre, también puede engañar a otros según sus propios deseos, incluso a su propia madre.
Por lo tanto, los padres de niños deben prestar atención a los tres puntos anteriores en cualquier momento y en cualquier lugar para asegurarse de que sus hijos no mientan y establezcan el hábito de la honestidad.