500 palabras que leí en la librería de la isla
El protagonista masculino Aj perdió a su esposa en la mediana edad y le robaron a ella sin ningún motivo. La única biblioteca valiosa desapareció. Vivió una vida de alcoholismo y mal genio, y era muy impopular, hasta que una niña de dos años cayó del cielo y fue abandonada en su librería. Adoptó una niña, cambiando así su vida. Más tarde se casó con un vendedor de una editorial y el destino mantuvo juntas a varias personas en la isla, y escribieron nuevos amores y odios. Gracias al cambio y la persistencia, la lectura ha penetrado en todos los rincones de la isla, cambiando los hábitos de vida e incluso las trayectorias de vida de muchas personas. Por ejemplo, el jefe de policía Lan Bais, a quien su profesor definió como no amante de la lectura cuando era niño, también se enamoró de la lectura cuando visitaba de vez en cuando a niñas abandonadas, e incluso acabó pasando el resto de su vida con su tío, la viuda Ismay.
Las frases de este libro son concisas, sin palabras sofisticadas ni frases complicadas. Todo sucedió con tanta normalidad y naturalidad, que quizás sea lo que lo hace único. Natural pero cálido, con el estado de ánimo y la técnica adecuados.
"Nadie es una isla, un libro es un mundo." En este hermoso mundo, nadie está solo. Si te sientes solo, es que no has encontrado a nadie que comparta tus intereses. AJ siente que nadie en este mundo lo entiende. Estudia porque se siente solo y no se siente solo porque estudia. La lectura puede enriquecer el alma de una persona y realzar su propia connotación. No tiene nada que ver con la fama y la fortuna.
AJ tuvo un matrimonio feliz, crió una hija excelente y ayudó a muchas personas en la ciudad. Pero parecía que Dios le jugó una gran broma y en ese momento contrajo una enfermedad incurable. La realidad es cruel. Sin embargo, aun así, el amor no puede ser abandonado por el cuerpo y el alma. La enfermedad puede obstaculizar su comunicación con ellos, pero no puede detener el flujo del amor.
Lo que nos falta hoy es leer. Por favor, dejemos que la lectura nos enriquezca, amamos la lectura y saboreamos la belleza del mundo en los libros.