El papel del interferón
Este fármaco está indicado para el tratamiento de enfermedades virales y determinadas neoplasias malignas. Se utiliza principalmente para tratar la hepatitis B crónica, la hepatitis C crónica y la leucemia de células pilosas. Es eficaz para enfermedades virales como verrugas genitales, cervicitis crónica, queratitis herpética, herpes zoster, fiebre hemorrágica epidémica y neumonía pediátrica por virus sincitial respiratorio. También tiene buenos efectos sobre otras enfermedades virales y tumores malignos como la leucemia mielógena crónica, el melanoma, el linfoma, etc. El interferón debe utilizarse bajo la supervisión de un médico experimentado.
Información ampliada:
El interferón es un tipo de glicoproteína altamente específico de especie. Por tanto, el interferón animal es ineficaz para los humanos y tiene propiedades antivirales e inhibidoras de la proliferación celular. Regulación y efectos antitumorales.
Las personas alérgicas, especialmente aquellas que son alérgicas a los antibióticos, deben utilizarlo con precaución. Si se produce una reacción alérgica durante la medicación, se debe suspender la medicación inmediatamente y tratar en consecuencia. Usar con precaución en pacientes con insuficiencia hepática y renal, así como insuficiencia cardiopulmonar. Las pastillas para dormir y los sedantes se deben utilizar con precaución al utilizar este producto.
Contraindicado en personas con alergia conocida a productos con interferón. Está contraindicado en personas con antecedentes de angina de pecho, infarto de miocardio y otras enfermedades cardiovasculares graves. Está contraindicado en pacientes con epilepsia y otros trastornos del sistema nervioso central. Está prohibido para personas con otras enfermedades graves que no puedan tolerar los efectos secundarios de este producto.
Referencia: Enciclopedia Interferón-Baidu