La Constitución estipula que las áreas donde las minorías étnicas viven en áreas concentradas implementarán la autonomía regional y establecerán qué derechos ejercer la autonomía.
Análisis jurídico: En las zonas donde conviven grupos étnicos en nuestro país, se implementa un sistema de autonomía étnica regional y se establecen órganos autónomos para ejercer la autonomía. En el sistema de autonomía étnica regional, las regiones autónomas equivalen a unidades administrativas a nivel provincial, las prefecturas autónomas son áreas étnicas entre regiones autónomas y condados autónomos, y los condados autónomos equivalen a unidades administrativas a nivel de condado. El estatus administrativo de las áreas étnicas autónomas se determina, en principio, sobre la base del tamaño territorial y la población de cada área autónoma. Las regiones autónomas están al mismo nivel que las provincias, las prefecturas autónomas están al mismo nivel que las ciudades a nivel de prefectura y los condados autónomos están al mismo nivel que los condados.
Base jurídica: Artículo 4 de la “Constitución de la República Popular China” Todos los grupos étnicos de la República Popular China son iguales. El Estado protege los derechos e intereses legítimos de todas las minorías étnicas y mantiene y desarrolla la igualdad, la unidad, la asistencia mutua y las relaciones armoniosas entre todos los grupos étnicos. Se prohíbe la discriminación y la opresión contra cualquier grupo étnico, así como las acciones que socaven la unidad nacional y creen divisiones nacionales. El estado ayuda a cada área de minoría étnica a acelerar el desarrollo económico y cultural en función de las características y necesidades de cada minoría étnica. Las áreas donde varias minorías étnicas viven en comunidades concentradas implementarán la autonomía regional y establecerán órganos autónomos para ejercer su autonomía. Todas las áreas étnicas autónomas son parte inseparable del Partido Comunista de China. Todos los grupos étnicos tienen la libertad de utilizar y desarrollar sus propios idiomas hablados y escritos, y tienen la libertad de mantener o reformar sus propias costumbres y hábitos.