Buscando tu hermosa prosa
La crueldad del mundo quita la belleza sin dejar sombra, y los años lo borran todo. Nunca creeré que tu belleza desaparecerá con el tiempo y desaparecerá sin dejar rastro. No dejes rastro, los años realmente lo han suavizado, la distancia está ahí, desaparecida en el duro invierno, no se encuentra por ningún lado. Los años son despiadados y dejan huellas de los años. La vida incompleta ya no es hermosa, es solo un sentimiento de dolor, ya no es una exhibición hermosa.
Te fuiste sin piedad, dejándome sola para escribir poemas. Mis poemas están todos hechos por ti y tu alma. Contienen tu sonrisa, tu compromiso y tus palabras de aliento. En mi poesía, tu bondad y tu mirada afectuosa. Vives en la poesía, me acompañas durante la primavera, el verano, el otoño y el invierno, y pasas la noche antes del amanecer. Esos son tus pasos, vienen constantemente hacia mí, pero no puedo ver tu apariencia, te has estado escondiendo en las palabras y nunca vuelves a aparecer. Quédate en la poesía y nunca salgas. Es tu compromiso, tu personalidad, que siempre hayas escrito poesía. Es decir, tu corazón perdido siempre te buscará.
El sentimiento de anhelo es una canción, el interminable paso de la vida, los interminables años de permanencia, eso es una promesa para ti. Ese es tu pasatiempo. Sigo escribiendo. Desde que me conociste te has cerrado y has dejado de escribir. Esa no es la vida que quieres. No tienes más remedio que ir a la cárcel. Enciérrate firmemente en el puerto oscuro. Ese no es tu carácter. Nunca saldrás de ese cielo oscuro. ¿Te lastimé? No es que quiera entrar en tu mundo de sueños. Más bien, hay un pasaje de texto que me atrae y me mantiene acercándome cada vez más a él, a un lugar soleado. Tu mundo es el lugar que anhelo. Desde que entré nunca he salido, me encanta, me encanta escribir, sigue tallando en tu corazón, tallando nuestras historias y nuestro mundo de sueños.
Esa podría ser la vida, mi vida, no puedo cambiarme a mí mismo, por eso estoy obsesionado. Te culpo por no apreciarte lo suficiente y no recordarme para siempre. He olvidado que es tu mundo interior y tu dolor. Porque no puedo escribir en un mundo sin ti y me he acostumbrado a este tipo de vida. No me culpes por ser demasiado persistente, porque no puedo salir de tu mundo. Ese es el lugar al que quiero ir, el hermoso puerto, y tu mundo interior es mi sueño. Siempre me has enseñado a escribir, me has atraído y me has hecho imposible dejar tu mundo. El sol brilla y el paisaje es pintoresco. Dijiste que me darías luz del sol para iluminar mi mundo, pero sentí calor, pero te fuiste. ¿Es porque te conviertes en un rayo de sol y nunca podrás volver a ser como eras antes? Te he estado buscando, caminando por la hierba, a través de ríos y montañas, pero no encuentro tus huellas. Sigo mirando. La distancia es hermosa, pero no puedo verla. Quiero encontrar tu belleza, tallar nuestra historia, representar tu pasado y perseverar en un fragmento de texto. Esa es la dirección de mi corazón, el mundo del sol.