¿Su hijo pospone las cosas? Pruebe estos 16 consejos.
Para niños de 2,3-4 años, prepara un cronómetro para que el niño sepa que muchas cosas tienen un tiempo determinado. Por ejemplo, utilice la herramienta de cuenta regresiva del reloj de arena y pida a los niños que completen una tarea (comer y vestirse) dentro del tiempo del reloj de arena. El reloj de arena es intuitivo e interesante y puede atraer a los niños a correr contra el tiempo. También aumentará los movimientos del niño.
3. Haz un gráfico de autodisciplina de crecimiento (que abarque diario, semanal y mensual). Se recomienda utilizarlo todos los días y desarrollar un hábito. La tuberculosis lo tiene.
4. El tiempo es abstracto, puedes utilizar juguetes o libros ilustrados.
Recomendados: “El libro de las campanas”, “Hola buenos tiempos”, “François y el tiempo perdido”, etc. Guíe a los niños para que reconozcan y comprendan el tiempo.
A sus 5,6 años, llama a la policía y aprende a reconocer al niño.
Relojes
Describe claramente el tiempo y cuantifícalo.
6. Pregunta: ¿Qué hiciste hoy? No sólo puede ayudar a los niños a darse cuenta de a qué dedica su tiempo, sino que también permite a los padres ayudar a sus hijos a planificar su tiempo de manera razonable.
7. Reconocer el paso del tiempo. Utilice casos de la vida para guiar a los niños a planificar su tiempo de manera razonable, de modo que no puedan regresar en el último segundo.
También puedes trazar una línea de tiempo con tus hijos para que sepan claramente el tiempo invertido y los resultados de cada tarea.
Deja que los niños experimenten el paso del tiempo y obtengan la satisfacción de completar tareas.
8. Retraso: juegue otros 5 minutos
Dar al niño un tiempo de amortiguación de 5 minutos antes del final puede aliviar eficazmente la resistencia del niño y facilitarle la aceptación. y comprender el concepto de tiempo también hay una cierta comprensión.
9. Poner un plazo para las cosas, que es una especie de supervisión.
El punto clave es hacerles saber a los niños que necesitan tener un cierto sentido de urgencia si quieren completar cosas.
10. Haz un plan de tiempo y evita ser demasiado detallado, lo que muchas veces es difícil de cumplir.
Se puede dividir en semanas y días, y el plan diario se divide en mañana, mediodía, tarde y noche, lo cual es flexible y fácil de ajustar.
11. Llegar a tiempo según lo acordado.
Partiendo del más simple hábito de la puntualidad, deja que los niños aprendan a controlar activamente su tiempo a partir de los detalles, y afrontar todo con calma y con un plan, por ejemplo, salir de casa cinco minutos antes para ir a la guardería; pidiendo a los niños que jueguen con anticipación. Llegue en 10 minutos.
12. En lugar de instar a que se vacunen, deje que los niños tomen sus propias decisiones.
Perseguir distraerá la atención del niño y evitará que se concentre en el trabajo, perdiendo así más tiempo y haciendo las cosas más lentamente. Déle al niño un período de tiempo y déjelo enfrentarlo de la manera que quiera. Simplemente proporcione un reloj de arena o un cronómetro. (Una madre impaciente cría a un niño que se entretiene)
13. Déjele saber las prioridades.
La energía de una persona es limitada y hay que aprender a elegir y organizar el tiempo de forma razonable. Ayude a los niños a planificar lo que deben hacer y concentrarse todos los días. Todo el tiempo está reservado para cosas importantes y el tiempo fragmentado está reservado para cosas que no son urgentes ni importantes. Establecer prioridades con sus hijos logrará resultados significativos y ahorrará tiempo en la mayor medida.
14. Organizar el tiempo de descanso de forma razonable. No trates de revisar tu teléfono y mirar televisión como un descanso. Acuéstese y levántese temprano, realice más actividades al aire libre, haga ejercicio moderado y mejore su condición física.
15. Los padres deben dar ejemplo a sus hijos en la gestión del tiempo.
16. Permitir que los niños cometan errores en el proceso de aprendizaje de la gestión del tiempo.
Hacerle consciente de las consecuencias de no utilizar bien su tiempo y desperdiciarlo. Al mismo tiempo, valora el momento y haz las cosas de manera eficiente.
Lo que amplía la brecha entre los niños no es el coeficiente intelectual, sino
Este es el control del tiempo.
Que cada niño se convierta en dueño del tiempo.