¿Qué es el “período sensitivo obstinado” de un niño y cómo afrontarlo?
Muchos padres encontrarán que cuando sus hijos tienen alrededor de 3 años, son muy persistentes en sus propias ideas y a menudo no cooperan con la disciplina de sus padres. Algunos padres tomarán medidas drásticas, pensando que esto se debe a que sus hijos son desobedientes y deben ser estrictamente disciplinados. Pero, ¿es realmente adecuada esta educación sencilla y tosca para los niños de esta etapa? Aparentemente no. Cuando los niños tienen alrededor de 3 años, comienza a aflorar su autoconciencia y tienen muchas ganas de expresar sus propias ideas. Obviamente, una fuerte intervención de los padres en este momento no favorece el desarrollo de la autoconciencia de los niños. De hecho, el comportamiento paranoico de los niños durante este período es una manifestación del "período sensitivo obstinado".
1. ¿Qué es el "período sensitivo testarudo"? Alrededor de 1,3 años es el "período testarudo y sensible" de los niños.
Durante este período, los niños son particularmente tercos en sus expresiones de comportamiento. Cuando el desarrollo de las cosas no coincide con su imaginación, mostrarán una resistencia particularmente fuerte. Este comportamiento es muy evidente cuando el niño tiene 3 años. Es muy persistente en la configuración de su autoconcepto y, a menudo, tiene emociones de llanto.
2. A menudo va acompañado de la formación de un sentido de orden.
El sentido interno de orden de los niños es muy obvio, porque los niños en esta etapa suelen ir acompañados de la aparición y el desarrollo de un sentido del orden. El pensamiento de los niños tiene su propia lógica, que no puede ser controlada por los adultos ni corregida por conceptos educativos poderosos. Cuando se altera el sentido del orden de los niños, se sienten impotentes.
3. El período inicial de resistencia del niño
En esta etapa, para mantener el orden interior, el niño comienza a tener una mentalidad rebelde. A veces, incluso para resistir, los niños no consideran si su perseverancia es correcta. Al mismo tiempo, los niños están más ansiosos por establecer el orden ambiental y muchas veces hacen oídos sordos a la disciplina de sus padres o cantan lo contrario.
Se puede comprobar que este periodo sensible es una etapa necesaria para que los niños crezcan. Las ideas del niño comienzan a surgir y formarse, y el niño está más dispuesto a expresar sus ideas y a comportarse de manera más rebelde. En este momento, los métodos educativos orientados a las órdenes de los padres son completamente inútiles, porque muchas veces los niños optarán por "hacer lo contrario" o "hacer lo contrario".
2. ¿Cómo se forma la “terquedad” de un niño? 1. Los niños están ansiosos por expresar sus ideas
En comparación con etapas de crecimiento anteriores, los niños ya no están dispuestos a cooperar con la guía de sus padres y a obedecer absolutamente la educación de sus padres. Los niños quieren que sus ideas se expresen y se hagan realidad. Este deseo interno de expresión hace que los niños parezcan demasiado persistentes.
2. Los niños están expuestos a diferentes cambios ambientales.
En esta etapa, los cambios ambientales a los que están expuestos los niños son más complejos y diversos, y se potencia su capacidad de aprendizaje. Sobre esta base, los niños tienen opiniones más ricas sobre las cosas y no están satisfechos con escuchar a sus padres, sino que están más dispuestos a adquirir nuevas experiencias a través de su propia exploración e intentos. Por lo tanto, los niños no están dispuestos a cooperar bajo el control de sus padres.
3. Estoy ansioso por recibir más atención
La conciencia individual independiente de los niños es cada vez más obvia y los niños esperan que se les pueda prestar atención a sus expresiones de comportamiento. Este tipo de atención hace que el niño se sienta presente. Al mismo tiempo, el deseo de atención también estimula el deseo de expresión del niño. En este momento, los padres pensarán que a sus hijos les gusta presumir.
Se puede decir que aunque durante este período el comportamiento de los niños será algo rebelde y la disciplina de los padres será más difícil de implementar, esto es algo feliz para el crecimiento de los niños. La capacidad de pensamiento, la capacidad de comportamiento y los rasgos de personalidad de los niños se han mejorado en diversos grados. El niño ya no es un "buen bebé", sino más reflexivo.
En tercer lugar, los padres deben aprender a afrontar situaciones especiales en períodos "especiales". Deben tener principios y saber ser flexibles.
Este período sensible es una gran prueba para las habilidades parentales de los padres. Los padres deben enseñar a sus hijos un cierto sentido de las reglas, pero al mismo tiempo, no deben restringirlos demasiado. Entonces es un proceso difícil para el nivel educativo de los padres. Para cultivar el sentido de las reglas en los niños, los padres deben tener principios, pero para no imponer demasiadas restricciones a sus hijos, los padres deben ser flexibles.
2. El tono imperativo no es tan bueno como dejar que los niños elijan múltiples opciones.
Por ejemplo, si los padres quieren que sus hijos coman más fruta, la respuesta del niño suele ser "¡No!". Sin embargo, si la pregunta de los padres es "Hijo, ¿quieres comer manzanas o peras?" Por lo general, se respetan las ideas y se logran los objetivos de los padres. Permitir que los niños tomen más decisiones puede hacer que se sientan respetados y, por lo general, darán respuestas claras.
3. Sea racional y comprenda las emociones de su hijo.
Muchas veces, los padres se impacientarán con la terquedad de sus hijos y sus emociones pueden infectarse fácilmente, provocando que sus propios conceptos educativos se alteren emocionalmente, encubriendo la intención original de la educación y facilitando la desahogar sus emociones. Cuando los padres mantienen la calma, sus padres pueden comprender y aceptar las ideas de sus hijos.
4. Establecer un sistema claro de recompensas y castigos.
El uso de recompensas para regular las palabras y los hechos de los niños generalmente puede obtener una respuesta oportuna del niño. El sistema de recompensa y castigo puede ayudar a los niños a comprender lo bueno y lo malo del comportamiento en sí. Evitar el comportamiento incorrecto refuerza la impresión del comportamiento recompensado. Deje que sus hijos comprendan que llorar no hará que sus ideas tengan éxito y puede conducir a un castigo más severo.
Cuando los padres están preocupados por la terquedad e ignorancia de sus hijos, también podrían verlo desde una perspectiva diferente. El "Período Sensible Obstinado" también es una etapa importante en el crecimiento de un niño, lo que demuestra que las habilidades del niño en todos los aspectos mejorarán hasta cierto punto. Al aprovechar este período delicado, los padres ingeniosos pueden ayudar a sus hijos a crecer rápidamente y desarrollar buenos hábitos.