Cómo convertirse en un excelente profesor de formación
Aunque no animamos a los formadores corporativos a realizar análisis detallados, es obvio que un formador exitoso necesita un cierto grado de autoconciencia y autoaceptación. Cuanto mayor sea nuestra autoconciencia, más opciones y libertad tendremos. Como cualquier otro trabajo de "ayudar" a los demás, es importante ser consciente de lo que nos motiva.
2. La capacidad de inspirar a otros.
Los formadores corporativos no pueden pedir a sus alumnos que hagan cosas que no pueden o no quieren hacer en sus vidas. Los formadores son conscientes de las necesidades de desarrollo de los alumnos y los animan a identificarse con sus propios sentimientos y valores y a esforzarse por alcanzar sus objetivos más elevados. Los formadores corporativos exitosos aprovechan la motivación intrínseca de sus alumnos en lugar de aprovechar las presiones externas.
3. La capacidad de construir relaciones.
Los formadores corporativos deben parecer accesibles, amigables y dignos de confianza. Creen que la formación es algo muy importante. Los formadores deben ser útiles y capaces de expresar plenamente sus ideas. Deben concentrarse en completar la tarea sin pensar en ganancias y pérdidas. El éxito de la formación depende en gran medida de la relación entre los formadores corporativos y los alumnos.