Entrenarte
En primer lugar, se trata de una actitud cautelosa de las empresas hacia la selección de talento. Puede parecer que lo hace en vano, pero la formación corporativa también requiere mano de obra y energía.
En segundo lugar, se trata de una clara violación de las leyes laborales. Si no lo quiere, puede recopilar pruebas laborales, como tarjetas de tiempo, avisos de capacitación, etc., y pedirle a la empresa que le pague una remuneración laboral. Por supuesto, las empresas también pueden pedirle honorarios de formación, lo cual es un asunto muy trivial.
Por último, la formación corporativa de tres días no es sólo una oportunidad para que la empresa te conozca, sino también una oportunidad para que tú conozcas la empresa. ¿por qué no? Decimos que ver para creer. De todos modos, es una elección de dos vías. Tanto si quieres hacer negocios como si no, compórtate bien durante tres días y observa con atención. Si no es bueno, vete. ¿Quién puede detenerte?