¿Qué refleja insistir en la supremacía de las personas?
¿Por qué insistes en poner a las personas primero?
1. El pueblo es la base del país.
Las personas son la base y piedra angular de un país. Sin el apoyo y la participación del pueblo ningún emprendimiento podrá realizarse y tener éxito. Adherirse a un enfoque orientado a las personas significa anteponer los intereses de las personas, aspirar a satisfacer sus necesidades, buscar beneficios para las personas y lograr el desarrollo.
2. El pueblo es el motor del desarrollo
El pueblo es el principal organismo y fuerza que promueve el desarrollo social. Crea riqueza social y logros civilizatorios. Adherirse a un enfoque orientado a las personas significa aprovechar plenamente el entusiasmo, la creatividad y la iniciativa de las personas, movilizar plenamente la sabiduría y la fuerza de las personas y promover el desarrollo de la economía, la ciencia y la tecnología, la cultura y otros campos.
A principios de 2020, la repentina epidemia de COVID-19 trajo desafíos sin precedentes al mundo y puso a prueba las capacidades de gobernanza nacional de varios países. En este momento importante en el que la seguridad de la vida y la salud de las personas están seriamente amenazadas, hemos reunido una fuerte fuerza conjunta para luchar contra la epidemia y hemos demostrado una vez más al mundo la filosofía de gobernanza centrada en las personas.
El pueblo es el dueño del país.
El pueblo es el dueño del país y debe disfrutar de amplios derechos y libertades y participar en la toma de decisiones y la gestión del país. Adherirse a la supremacía del pueblo significa respetar la posición dominante del pueblo, proteger los derechos políticos, económicos, sociales y culturales del pueblo, promover la equidad y la justicia social y construir una sociedad que satisfaga al pueblo.
4. Adherirse a un enfoque orientado a las personas
En la práctica, adherirse a un enfoque orientado a las personas se refleja en muchos aspectos. En primer lugar, formular e implementar conceptos y políticas de desarrollo centrados en las personas, prestar atención y resolver los intereses más directos de las personas.
En segundo lugar, debemos escuchar las voces del pueblo, realizar extensas encuestas de opinión pública y toma de decisiones participativa, y promover la participación y expresión del pueblo. En tercer lugar, fortalecer la construcción de sistemas de seguridad social y servicios públicos para mejorar el bienestar de las personas. Finalmente, debemos fortalecer la protección de los derechos e intereses de las personas y la construcción del estado de derecho para salvaguardar los derechos e intereses legítimos de las personas.
Conclusión: El pueblo es supremo porque el pueblo es la base y la fuerza motriz del país y es el amo del país. En la práctica, debemos respetar el estatus subjetivo de las personas, prestar atención a sus necesidades e intereses, promover su participación y desarrollo y lograr su felicidad y progreso social.