Sabrosas recomendaciones de la Biblioteca Nacional
La Biblioteca Nacional no es sólo un lugar de encuentro de conocimiento y cultura, sino también de una gran cantidad de comida deliciosa. En los últimos años, con el fin de enriquecer la experiencia lectora de los lectores, la Biblioteca Nacional también ha realizado nuevos desarrollos en el ámbito de la alimentación.
En primer lugar, vale la pena probar la cafetería de la Biblioteca Nacional. Los granos de café aquí son todos granos de café Arábica de alta calidad, lo que le permite saborear el rico sabor del café. Además, los pasteles aquí son geniales, y el pastel de terciopelo rojo es uno de ellos. Los detalles esponjosos son inolvidables.
En segundo lugar, la Biblioteca Nacional también cuenta con una guardería donde los lectores pueden dejar jugar a sus hijos y disfrutar de los servicios de restauración. El restaurante del vivero ofrece una variedad de comidas que incluyen almuerzo, té de la tarde y cena, con carne, verduras y una variedad de frutas para elegir. Además, hay muchas bebidas frías especiales para degustar, que son ácidas y dulces, perfectas para refrescarse en verano.
Finalmente, la Biblioteca Nacional también cuenta con una calle de comida con variedad de snacks y productos de catering, entre ellos hamburguesas, pizza, pollo frito, fideos fritos y snacks varios. Cada stand está construido por un equipo profesional y es de excelente calidad. Recomendamos encarecidamente la barbacoa buffet. La barbacoa aquí es muy auténtica y se puede degustar carne de res, costillas, pollo y varias verduras de una sola vez. Los recorridos gastronómicos con familiares y amigos son grandes experiencias.
La Biblioteca Nacional no es sólo un patrimonio cultural, sino también una comida deliciosa que te hará babear. Ya sea que esté estudiando o descansando, aquí podrá disfrutar de una comida deliciosa y sentir la rica atmósfera cultural.