¿Cómo afectarán las relaciones exteriores al desarrollo económico y social del país?
Desde el establecimiento de relaciones diplomáticas hace 30 años, las relaciones entre China y Estados Unidos han logrado avances significativos. Después de que Obama asumió el poder, especialmente en el contexto de la crisis financiera, la relación entre los dos partidos pasó a un primer plano de la historia por primera vez. Se puede decir que la dirección de las relaciones entre China y Estados Unidos afecta los nervios de todo el mundo. En el traicionero entorno de la política internacional, esta cuestión es aún más complicada y confusa. También es cierto que la gente tiene opiniones diferentes sobre este tema. Siento que después de 30 años de altibajos, a medida que las relaciones en todos los aspectos se vuelven cada vez más maduras, la desconfianza entre China y Estados Unidos también está aumentando. En otras palabras, a medida que China y Estados Unidos se vuelven inmaduros en una amplia gama de temas, su desconfianza más natural en las intenciones a largo plazo de cada uno está creciendo.
Una revisión del desarrollo de las relaciones chino-estadounidenses
En 1971, las dos partes iniciaron el establecimiento de relaciones diplomáticas entre los dos países a través de la diplomacia de ping-pong. Desde 65438 hasta 2009, cuando Deng Xiaoping visitó los Estados Unidos, China y Estados Unidos comenzaron a tener relaciones bilaterales sustanciales. En noviembre de 1986, la Flota del Pacífico de Estados Unidos visitó Qingdao, China. Las relaciones bilaterales entre China y Estados Unidos se extendieron desde los campos político y económico hasta el campo militar. En agosto de 2005 se celebró en Beijing el primer diálogo estratégico entre China y Estados Unidos y las relaciones bilaterales alcanzaron un nivel estratégico. Poco después de que Estados Unidos confiara en que el presidente Obama asumiera el cargo en 2009, la nueva Secretaria de Estado Hillary Clinton visitó China y mantuvo estrechos contactos con China. En general, se considera que esta medida es el preludio de una nueva etapa de desarrollo de las relaciones entre China y Estados Unidos.
A juzgar por el proceso de desarrollo mencionado anteriormente, la tendencia general del desarrollo de las relaciones bilaterales entre China y Estados Unidos avanza constantemente, por lo que en el período previsible, la cooperación entre las dos partes será más estrecha. Pero también debemos señalar que a medida que aumente la fuerza de China, Estados Unidos inevitablemente la considerará como la mayor amenaza potencial que infringe los intereses de Estados Unidos o China. Obviamente, esto está directamente relacionado con la estrategia de hegemonía global de Estados Unidos. Entonces, desde esta perspectiva, la desconfianza de los estadounidenses hacia China será más prominente en el futuro. La “relación de amor y odio” de Estados Unidos con China puede parecer contradictoria, pero si se estudia detenidamente su política hacia China, no la encontrará extraña. De hecho, la política de Estados Unidos hacia China no ha cambiado, pero China cambia constantemente y se fortalece. No importa cómo China demuestre su fuerza, inevitablemente "infringirá" los intereses de Estados Unidos. Por otro lado, la dependencia de Estados Unidos de China y la influencia de China en el mundo impiden que Estados Unidos tome medidas drásticas. Debido a la existencia de esta situación, la situación actual ha puesto temporalmente la zanahoria en primer plano, pero también debemos ver que el palo también se está volviendo más duro gradualmente. Todo esto determina que las relaciones entre China y Estados Unidos deben avanzar a un ritmo de progreso y giros y vueltas.