La Red de Conocimientos Pedagógicos - Aprendizaje de japonés - En la antigüedad, cuando una familia adinerada compraba una empleada doméstica, además de verse bien y trabajar duro, también preguntaban sobre cuestiones de privacidad. ¿Qué es esto?

En la antigüedad, cuando una familia adinerada compraba una empleada doméstica, además de verse bien y trabajar duro, también preguntaban sobre cuestiones de privacidad. ¿Qué es esto?

Como todos sabemos, en la antigüedad, la naturaleza de clase de la sociedad feudal era particularmente fuerte y la opresión de clase entre la gente era particularmente grave. Muchas personas pasan toda su vida quejándose de sus orígenes, como si hubieran nacido bajos y nunca pudieran recuperarse. Lo único que todos pueden hacer es rezar para tener un buen hijo en el futuro. Las familias ricas suelen contratar sirvientas para que vayan a sus casas a servirse a sí mismas y a sus familias. Sin embargo, tienen requisitos estrictos a la hora de comprar sirvientas.

Una criada debe cumplir muchas condiciones.

Ha habido diferentes opiniones a lo largo de los años sobre el problema de las familias adineradas que compran sirvientas. Alguien lo dijo. Creen que deben comprar unas hermosas, porque las sirvientas representan hasta cierto punto la apariencia de una familia, por lo que las sirvientas de alto valor son más fáciles de sobornar.

Algunas personas piensan que tienen que encontrar a alguien que pueda trabajar. Después de todo, les pagan. Si son rápidos, pueden contratar menos personas y ahorrar dinero. Obviamente estas son condiciones, pero no son las más importantes.

La condición más importante es que la criada sea pura.

A la hora de buscar sirvienta, también hay que preguntar sobre la vida amorosa de la otra persona, e incluso si ha tenido hijos. Y todo esto es para facilitarle al protagonista masculino el uso de la sirvienta. Aunque hoy nos parezca increíble, era muy común en el entorno social de aquella época.

Reflejando la oscuridad de la sociedad de aquella época.

Este fenómeno también refleja la injusticia del entorno social hacia las niñas en aquella época. A las mujeres, por lo general, no se les permite mostrar la cara cuando salen y solo pueden enseñarse entre ellas en casa. Porque es probable que se encuentren con gente mala cuando salen.