El pensamiento histórico requiere que manejemos bien las relaciones.
En pocas palabras, es una forma de pensar que conecta el pasado, el hoy y el futuro. Al igual que un rayo, si determinas el origen (pasado) y otro punto (hoy), puedes determinar la dirección de la línea recta después de conectar estos dos puntos (dirección futura).
En otras palabras: cuanto más clara sea nuestra comprensión de la historia pasada y de la realidad actual, más precisas serán nuestras predicciones para el futuro; si presuponemos un futuro, debemos encontrar uno realista en nuestra comprensión de la historia; . Ubicación.
1. Comprensión integral, sistemática y profunda de los acontecimientos y personajes históricos.
Para cultivar el pensamiento histórico, primero debemos aprender a comprender los acontecimientos y personajes históricos de manera paciente, integral y sistemática. y en profundidad. La historia es complicada y requiere que pensemos racionalmente. A medida que pasa el tiempo, los sistemas sociales, los antecedentes culturales, la distribución de la riqueza, la ubicación geográfica, etc. pueden cambiar. Debemos aprender a explorar las razones y las relaciones causales detrás de ellos.
Solo con una comprensión integral, sistemática y profunda de los hechos y personajes históricos podremos tener un pensamiento objetivo y claro.
2. Aprender a analizar, comparar y resumir hechos y personajes históricos.
La historia no es sólo un simple nodo temporal, sino que también contiene muchos detalles, intersecciones y penetraciones. El pensamiento histórico requiere que aprendamos a analizar, comparar y resumir acontecimientos y personajes históricos. El análisis debe prestar atención a los detalles de cada evento o personaje y el significado detrás de él, la comparación debe prestar atención a las similitudes y diferencias, y la inducción debe buscar patrones y conclusiones. Sólo así podremos comprender mejor la naturaleza de los acontecimientos y descubrir las leyes lógicas y empíricas entre ellos.
3. Presta atención a la cultura, la filosofía y la especulación.
El pensamiento histórico no es sólo la comprensión de acontecimientos y personajes, sino también la cultura, la filosofía y la especulación que representa. El pensamiento histórico requiere que tengamos ciertas cualidades filosóficas y que pensemos en los pensamientos, intuiciones y contribuciones de los sabios siguiendo las pistas de los acontecimientos y personajes, a fin de establecer nuestra propia nueva comprensión del mundo y de la humanidad. Esto es de gran importancia para que podamos comprender y analizar mejor los acontecimientos y personajes históricos, así como los fenómenos sociales actuales.