¿Qué experto puede ayudar a traducirlo? !
Investigar el reclutamiento y la formación de miles de nuevos graduados es sólo el comienzo. Elegir al candidato equivocado puede agotar los recursos financieros de una empresa durante años.
Pocas empresas pueden evitar los siguientes errores: personas que entran en pánico bajo presión por primera vez; personas con altas calificaciones académicas que no tienen capacidad para aprender cosas nuevas; personas que sufren de depresión debido a demasiadas ausencias; La gente del establo resulta ser ladrones, o algo peor.
Hay otra situación que no es tan dramática, pero no mucho mejor, y es que esas personas no pueden volar tan alto como esperas, o su desempeño no es fluido, y su futuro es sombrío para ellos.
Lo primero que los reclutadores deben recordar es que las personas son inmutables. La sabiduría ha ido disminuyendo lentamente, pero no ha cambiado mucho a lo largo de mi carrera. Lo mismo ocurre con las habilidades, como la capacidad de aprender un idioma o la capacidad de procesar números.
La mayoría de las personas esperan cambios de personalidad, especialmente en respuesta a la ansiedad, la baja autoestima, el estrés o la apatía emocional. Pero los datos de los últimos 50 años muestran una respuesta clara: esto no va a cambiar. Un extrovertido puede volverse menos extrovertido; lo mismo ocurre con una persona tímida, pero su personalidad básica sigue siendo la misma. Las crisis personales pueden afectar la forma en que afrontamos los problemas: podemos empezar o dejar el alcohol, las drogas, la religión o las técnicas de relajación, que pueden tener un gran impacto.
Las habilidades se pueden mejorar y aprender otras nuevas, pero no necesariamente. Las personas pueden volverse agresivas cuando buscan trabajo. Así como los políticos pueden cambiar en su forma de vestir y de hablar. Pero todo esto tiene un precio, y el valor del precio suele ser mayor que el valor del éxito. Elige lo que realmente ves en lugar de lo que quieres cambiar.
Del Financial Times