Características de la era postindustrial
(2) La distribución ocupacional se caracteriza por el ascenso de la clase técnica. El segundo aspecto que distingue a las sociedades postindustriales es el cambio en la distribución ocupacional. La llamada distribución ocupacional no sólo se refiere a dónde trabaja la gente, sino también a qué tipo de trabajo realizan. Con el desarrollo de la economía orientada a los servicios, el foco del trabajo se ha desplazado hacia las oficinas, las instituciones educativas y los departamentos gubernamentales, lo que naturalmente ha llevado a un cambio en las ocupaciones hacia los trabajadores administrativos. Tomemos como ejemplo la estructura ocupacional de los Estados Unidos. No fue hasta 1956 que el número total de trabajadores administrativos superó por primera vez al número total de trabajadores manuales. Desde entonces, la proporción entre ambos se ha ampliado aún más, y en 1970 superó el 5:4. El cambio más sorprendente, sin embargo, es el crecimiento del personal profesional y técnico, que duplica la tasa de crecimiento del número total de empleados. Hay otra estadística que da una idea mejor: el número de científicos e ingenieros. Son un grupo clave en la sociedad postindustrial. Toda la clase calificada está creciendo al doble de la tasa de la fuerza laboral total, mientras que los trabajadores tecnológicos están creciendo al triple de la tasa de la fuerza laboral total.
(3) El principio axial es que el conocimiento teórico se ha convertido cada vez más en la fuente de innovación y la base para la formulación de políticas sociales. La sociedad industrial es una sociedad que produce bienes y coordina la relación entre humanos y máquinas. La sociedad postindustrial es una sociedad organizada en torno al conocimiento, con control social y orientación de la innovación y el cambio. Esto crea nuevas relaciones sociales y nuevas estructuras que deben gestionarse políticamente.
Por supuesto, el conocimiento es esencial para el funcionamiento de cualquier sociedad. Pero lo diferente de la sociedad postindustrial es que el carácter del conocimiento mismo ha cambiado. El conocimiento teórico domina y se convierte en la fuerza decisiva en la toma de decisiones y en la orientación del cambio. La teoría es más importante que la experiencia y el conocimiento está codificado en un sistema abstracto de símbolos (como un sistema axiomático) que puede usarse para describir experiencias dispares.
Cualquier sociedad moderna actual depende de la innovación y el control social del cambio. La implementación del control social crea una necesidad de planificación y predicción en la sociedad. Es debido a este cambio en las percepciones sobre la naturaleza de la innovación que el conocimiento teórico se vuelve extremadamente importante. En la sociedad moderna, el desarrollo de un campo depende cada vez más del progreso del trabajo teórico. El trabajo teórico ordena (codifica) el conocimiento existente y señala formas de verificarlo empíricamente. De hecho, la teoría y el conocimiento se están convirtiendo cada vez más en recursos estratégicos para la sociedad, es decir, principios axiales. Las escuelas, los institutos de investigación y los servicios de inteligencia se convirtieron cada vez más en instituciones centrales de la nueva sociedad.
(3) La dirección futura es el control y la evaluación de la tecnología. Según el modelo predictivo de las nuevas tecnologías, es posible que la sociedad postindustrial domine nuevos medios de cambio social, a saber, planificar y controlar el desarrollo de la tecnología. A medida que las sociedades se vuelven más dependientes de la tecnología y la innovación, también aumentan las “incertidumbres” dañinas en los sistemas sociales. Sin embargo, el surgimiento de nuevos métodos de pronóstico y técnicas de planificación puede marcar el comienzo de una nueva etapa en la historia económica, es decir, la planificación consciente de los cambios tecnológicos por adelantado, reduciendo así las incertidumbres en la economía futura.