¿Qué cosas lascivas hicieron los emperadores en la historia?
El rey Zhou de la dinastía Shang fue un famoso tirano. Para su propio disfrute, buscó frenéticamente la riqueza y la riqueza de las personas e infligió torturas para que nadie se atreviera a hablar. El estanque de vino y el bosque de carne que construyó siguen siendo sinónimo de extravagancia e inmoralidad. Cavó un gran estanque en su palacio, lo llenó con vino en lugar de agua y luego se divirtió mucho con sus concubinas en el estanque. Cuando quería tomar algo, lo conseguía en la piscina. Junto a la piscina del vino se encuentra el bosque de carne. Las carnes que la gente común rara vez ve están colgadas en estantes de madera y se pueden comer a voluntad.
Es concebible que el rey Zhou y sus concubinas no pudieran terminar de comer este tipo de vino y carne. Si se rompe lo tiran y lo reemplazan por uno nuevo no sé cuantas veces se desperdicia. Todos sabemos lo que le pasó. Después de que la gente se empobreciera, el rey Wu de Zhou derrocó al rey Zhou de Shang y se quemó en Lutai.
El rey You de Zhou es un famoso rey débil. La historia sobre él se llama "Jugando con los príncipes junto a Beacon Fire", y todos deben estar familiarizados con ella. Se casó con una concubina llamada "Baosi". Ella tenía una linda sonrisa, pero no le gustaba sonreír. Para ganarse la sonrisa de la belleza, el rey Zhou You hizo todo lo posible. Finalmente, descubrí que los príncipes sonreían cuando venían a la corte, así que fingí que había una guerra y encendí una hoguera, pidiendo a los príncipes que vinieran y hicieran sonreír a la bella.
El rey You de Zhou trató los asuntos nacionales como un asunto trivial. Los príncipes fueron engañados repetidamente y no estaban dispuestos a proteger al rey You. Cuando los invasores extranjeros invadieron, el rey You encendió una hoguera, pero ningún príncipe estuvo dispuesto a ayudarlo, lo que provocó que los invasores extranjeros lo mataran.
Cuando los antiguos emperadores alcanzaron la cima de su poder y no fueron restringidos, se dieron el gusto y quisieron satisfacerse en gran medida, y fácilmente se volvieron disolutos. Las lecciones de la historia nos dicen que siempre hay que estar alerta. Si se deja llevar por su alto estatus, deja de ser cauteloso e ignora las vidas de los demás para su propio disfrute, el final suele ser más trágico.